Usted puede ayudar a identificar nubes en Marte

Un nuevo proyecto de ciencia ciudadana, dirigido por investigadores de la NASA (la agencia espacial estadounidense), hace posible que los voluntarios ayuden a través de internet a obtener nuevos y reveladores conocimientos sobre la atmósfera del Planeta Rojo.

Se denomina “ciencia ciudadana” a investigaciones científicas realizadas con la ayuda de voluntarios sin preparación técnica. Siguiendo unas instrucciones sencillas, estas personas pueden realizar trabajo que de otro modo debería ser realizado por científicos y consumiría una cantidad de horas de trabajo inviable para sacar adelante el proyecto en un plazo de tiempo razonable. Aprovechando la gran fuerza laboral de gente de todas partes, canalizada vía internet, es posible alcanzar logros notables.

En este nuevo proyecto, los voluntarios pueden ayudar a los científicos a identificar nubes marcianas en observaciones realizadas por la sonda espacial MRO (Mars Reconnaissance Orbiter) de la NASA, que entró en órbita al Planeta Rojo en 2006 y que desde entonces ha estado observándolo. Para hacer esta labor, la persona solo necesita un ordenador, un navegador web y una conexión a internet. Prestando esta ayuda, la gente puede contribuir a desentrañar algunos de los misterios de la atmósfera marciana. La iniciativa, Cloudspotting on Mars, emplea la plataforma de ciencia ciudadana Zooniverse.

El más importante de estos misterios es por qué la atmósfera de Marte tiene una densidad de tan solo un 1 por ciento de la que tiene la de la Tierra, a pesar de que hay cuantiosos indicios de que en el pasado la densidad de la atmósfera marciana era muchísimo mayor que la actual.

Hoy en día, la presión atmosférica en Marte es tan baja que el agua líquida simplemente se vaporiza desde la superficie del planeta hacia la atmósfera. Pero hace más de mil millones de años, había lagos y ríos cubriendo Marte, lo que sugiere que la atmósfera debía ser por aquel entonces mucho más densa que ahora.

¿Cómo perdió Marte su atmósfera? Una teoría sugiere que diferentes mecanismos podrían estar elevando el agua a la atmósfera, donde la radiación solar descompone esas moléculas de agua en hidrógeno y oxígeno (el agua está formada por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno). El hidrógeno es lo suficientemente ligero como para que pueda ascender hasta el límite de la atmósfera, escapando al espacio.

Al igual que la Tierra, Marte tiene nubes hechas de hielo de agua. Pero, a diferencia de la Tierra, también tiene nubes de dióxido de carbono, que se forman cuando hace suficiente frío para que la atmósfera marciana se congele localmente. Se espera que, con un conocimiento lo bastante bueno sobre dónde y cómo aparecen estas nubes, los científicos puedan entender mejor la estructura de la franja media de la atmósfera marciana. Dicha franja se encuentra a una altitud de entre 50 y 80 kilómetros.

“Queremos saber qué es lo que desencadena la formación de nubes, especialmente las de hielo de agua. Eso podría enseñarnos hasta qué altitud asciende en la atmósfera el vapor de agua y durante qué estaciones”, explica Marek Slipski, de la NASA.

Fuente: noticiasdelaciencia.com