Una de cada cuatro personas no tendrá vacuna contra el coronavirus hasta el 2022 en todo el mundo

Un pequeño grupo de países ya ha adquirido 3.760 millones de vacunas y la mitad se destinarán a las naciones más ricas donde sólo vive el 14% de la población mundial

Casi una cuarta parte de la población mundial no tendrá acceso a una vacuna contra la COVID-19 hasta, por lo menos, dentro de un año, según advierte un informe de la prestigiosa Universidad Johns Hopkins de Estados Unidos, que analiza la capacidad de producción de 13 compañías farmacéuticas y las compras realizadas ya por las grandes potencias.

Si los proyectos de 13 grandes laboratorios farmacéuticos (como AstraZeneca o Janssen), terminan con éxito, se podrían fabricar 6.000 millones de vacunas contra la COVID durante el próximo año. Además, dependiendo de la compañía, los precios variarían entre los seis dólares por dosis hasta los 74, en el caso de las más caras: las que usan la nueva tecnología de ARN mensajero y necesitan hasta menos 70 grados para su conservación.

Estos son los cálculos que han realizado los investigadores de la Facultad de Salud Pública de la Universidad Johns Hopkins. Pero todavía hay más.

3.760 millones de vacunas para el 14% de la población mundial

Hasta ahora, un pequeño grupo de países ya ha adquirido 3.760 millones de vacunas (muchas necesitan dos dosis) y la mitad se destinarán a las naciones más ricas, donde sólo vive el 14% de la población mundial.

Por lo tanto, aunque todos los fabricantes de vacunas lograran alcanzar su máxima capacidad de producción, por lo menos, una cuarta parte de la población mundial no tendría acceso a las vacunas hasta 2022.

“Este estudio ofrece una descripción general de cómo los países de altos ingresos han asegurado suministros futuros de vacunas COVID-19, pero el acceso para el resto del mundo es incierto”, alertan esto científicos de Estados Unidos en su informe que publica la revista médica BJM.

Un 68% de la población mundial ( y esto son 3.700 millones de adultos) están ya dispuestos a recibir una vacuna covid-19. Sin embargo, este grupo de expertos advierte que el actual sistema de oferta y demanda no favorece a los países de ingresos bajos y medianos, porque no tienen la capacidad económica suficiente para poder satisfacer su demanda interna de la vacuna COVID-19.

Según este nuevo informe científico, los programas de vacunación contra la COVID-19 “requieren una coordinación global sin precedentes y un compromiso sostenido de recursos financieros, logísticos y técnicos de los países de altos ingresos”.

Fuente: cadenaser.com