¡Tremendo récord! Científicos logran la temperatura más baja de la historia
Cuando el ‘clima’ se acerca al cero absoluto, también llamado 0 kelvin, ocurren cosas inexplicables
Gracias a un grupo de científicos alemanes, la humanidad se acercó un poco más a crear espacios controlados que tengan una temperatura 0 kelvin, lo más frío que se puede alcanzar en el universo.
En este caso, un grupo de investigadores del Centro de Tecnología Espacial Aplicada y Microgravedad (Universidad de Bremen), en Alemania, logró simular la temperatura más baja de la historia.
El lugar más frío de la Tierra tuvo 38 billonésimas de grado por encima del cero absoluto, a -237,15º, supremamente cercana al los cero grados kelvin, según reportó el medio alemán ‘Deutsche Welle’.
De acuerdo con ‘Live Science’, la investigación estudiaba las propiedades cuánticas del llamado quinto estado de la materia: “el condensado de Bose-Einstein (BEC), un derivado del gas que solo existe en condiciones de ultrafrío, al momento de romper el récord”.
Los átomos ultrafríos, que se mantienen a temperaturas cercanas a 0 kelvin, han sido utilizados durante más de 20 años para probar el comportamiento cuántico a escala macroscópica.
Gracias a esta investigación, publicada en la revista científica Physical Review Letters, las posibilidades de estudios referentes a la física de partículas se volvieron infinitas.
Comportamientos inusuales en el frío
Cuando los materiales se acercan a los 0 grados kelvin, o fase BEC, presentan curiosas propiedades normalmente observadas en los átomos. Es como si se comportaran como átomos gigantes.
Por ejemplo, forma líquida del helio fluye libremente sin importar la fricción.
Además, la luz se convierte en un líquido que se puede verter literalmente en un recipiente, de acuerdo con una investigación de 2017, desarrollada por el Instituto de Nanotecnología (NANOTEC), ubicado en Monteroni (Italia).
Por esta razón, la fase BEC representa en un tema especialmente atractivo, y desconocido, para los físicos cuánticos interesados en la mecánica de las partículas subatómicas.
Fuente: eltiempo.com