Primeras imágenes del polo norte de la luna gigante Ganímedes
La misión Juno de la NASA ha obtenido las primeras imágenes del confín norte de la luna Ganímedes de Júpiter, noveno objeto más gran del Sistema Solar.
Las imágenes infrarrojas recopiladas por el instrumento Jovian Infrared Auroral Mapper (JIRAM) de la nave espacial –durante un sobrevuelo de Júpiter el 26 de diciembre de 2019– proporcionan el primer mapeo infrarrojo de la frontera norte de la enorme luna.
Única luna en el sistema solar que es más grande que el planeta Mercurio, con 5.262 kilómetros de diámetro, Ganímedes se compone principalmente de hielo de agua. Su composición contiene pistas fundamentales para comprender la evolución de las 79 lunas jovianas desde el momento de su formación hasta la actualidad.
Ganímedes es también la única luna en el sistema solar con su propio campo magnético. En la Tierra, el campo magnético proporciona una vía para que el plasma (partículas cargadas del Sol) ingrese a nuestra atmósfera y cree una aurora. Como Ganímedes no tiene atmósfera que impida su progreso, la superficie de sus polos está siendo constantemente bombardeada por plasma de la gigantesca magnetosfera de Júpiter. El bombardeo tiene un efecto dramático en el hielo de Ganímedes.
«Los datos de JIRAM muestran que el hielo en y alrededor del polo norte de Ganímedes ha sido modificado por la precipitación de plasma», dijo en un comunicado Alessandro Mura, un co-investigador de Juno en el Instituto Nacional de Astrofísica en Roma. «Es un fenómeno del que hemos podido aprender por primera vez con Juno porque podemos ver el polo norte en su totalidad».
El hielo cerca de ambos polos de la luna es amorfo. Esto se debe a que las partículas cargadas siguen las líneas del campo magnético de la luna a los polos, donde impactan, causando estragos en el hielo allí, evitando que tenga una estructura ordenada (o cristalina). De hecho, las moléculas de agua congelada detectadas en ambos polos no tienen un orden apreciable para su disposición, y el hielo amorfo tiene una firma infrarroja diferente que el hielo cristalino encontrado en el ecuador de Ganímedes.
«Estos datos son otro ejemplo de la gran ciencia de la que Juno es capaz cuando observa las lunas de Júpiter», dijo Giuseppe Sindoni, gerente de programa del instrumento JIRAM para la Agencia Espacial Italiana.
JIRAM fue diseñado para capturar la luz infrarroja que emerge desde el interior de Júpiter, analizando la capa meteorológica de 50 a 70 kilómetros debajo de las nubes de Júpiter. Pero el instrumento también se puede usar para estudiar las lunas Io, Europa, Ganímedes y Calisto (también conocidas colectivamente como las lunas galileanas por su descubridor, Galileo).
Sabiendo que la cima de Ganímedes estaría a la vista de Juno el 26 de diciembre durante un sobrevuelo de Júpiter, el equipo de la misión programó la nave espacial para que girara y que instrumentos como JIRAM pudieran ver la superficie de Ganímedes. En el momento que rodeaba su aproximación más cercana a Ganímedes, a unos 100.000 kilómetros, JIRAM recolectó 300 imágenes infrarrojas de la superficie, con una resolución espacial de 23 kilómetros por píxel.
Fuente: europapress.es