Los hemisferios cerebrales no son iguales ni en los gemelos idénticos
Muestran sutiles diferencias que pueden ser genéticas o derivadas de la experiencia personal
Un nuevo estudio ha descubierto que existen variaciones sutiles en la organización funcional de los dos hemisferios cerebrales y que esas diferencias pueden ser tanto de origen genético como derivadas de la experiencia personal. La asimetría es más intensiva en los humanos que en los monos.
Nuestro cerebro está dividido en dos mitades que parecen en gran medida idénticas por fuera. Pero eso es solo una apariencia: en realidad, ni siquiera son imágenes especulares entre sí.
Ambas mitades constituyen la parte más grande del encéfalo y se llaman hemisferios cerebrales. Son inversos el uno del otro, pero no inversamente simétricos: son asimétricos entre sí.
En algunas tareas, nuestros hemisferios cerebrales funcionan de forma asimétrica y en función de la división del trabajo: la atención se procesa por lo general en el hemisferio derecho, mientras que el lenguaje se procesa a su vez en el izquierdo.
También se supone comúnmente que el pensamiento lógico y el procesamiento de las emociones están distribuidos asimétricamente.
Lateralización variable
Sin embargo, esta asimetría, conocida técnicamente como lateralización, no es igual en todas las personas. Generalmente es más débil en zurdos: alrededor de un 15% de los zurdos tienen centros del habla en ambas partes del cerebro. También hay diferencias entre diestros y entre sexos.
Todavía no está claro cuánto puede variar esta asimetría para las diferentes áreas y funciones del cerebro y cómo se determina la lateralización de nuestro cerebro, pero un estudio realizado por un equipo dirigido por Bin Wan, del Instituto Max Planck de Ciencias Cognitivas y Cerebrales Humanas en Leipzig, arroja alguna luz al respecto, según se informa en un comunicado.
Este equipo analizó las funcionales cerebrales de 1.014 hombres y mujeres utilizando imágenes de resonancia magnética funcional. Los investigadores examinaron la asimetría con la que trabajaban las diferentes áreas y redes del cerebro en diferentes tareas cognitivas.
Resultados claros
Los mapas 3D resultantes de estos escáneres cerebrales muestran qué áreas y redes del cerebro funcionan de manera asimétrica, y cuán fuertemente esto difiere de una persona a otra.
Confirman que el lenguaje, la semántica, la audición y la lectura, pero también el reconocimiento facial, las emociones y la cognición social, tienen lugar más en el hemisferio izquierdo de la mayoría de las personas.
El hemisferio derecho, por otro lado, es más activo en lo que respecta a la atención, la memoria de trabajo, el control de los impulsos y el procesamiento del dolor.
El grado de asimetría aumenta según el área y la función: los centros primarios de percepción y acción están organizados de manera menos asimétrica en promedio que las regiones del cerebro para el pensamiento abstracto. Las diferencias individuales también son más notorias en las regiones responsables de las funciones cognitivas superiores.
Heredabilidad
Sin embargo, lo más destacado del estudio es que los sujetos de prueba incluían gemelos monocigóticos y dicigóticos, por lo que el equipo también pudo determinar la heredabilidad de la lateralización: cuanto más hereditaria es la división del trabajo en los hemisferios cerebrales, más parecida debe ser en los gemelos idénticos.
El estudio descubrió que las diferencias hemisféricas en la distribución funcional a gran escala son hereditarias, particularmente la asimetría de las áreas cerebrales sensoriomotoras, algunas redes ubicadas en el lóbulo frontal y parte de los centros del lenguaje.
Otras áreas cerebrales, especialmente las que ostentan una asimetría particularmente fuerte, parecen menos hereditarias, destacan los investigadores: incluso los gemelos idénticos muestran claras diferencias individuales.
Tanto los factores prenatales como las experiencias realizadas en el curso de la vida se consideran como posibles influencias individuales sobre la asimetría cerebral. Explorar estos factores, pero también la base genética de la lateralización, podría ayudar a comprender mejor algunos trastornos neurológicos, plantean los investigadores.
Comparativa sorprendente
Otro resultado interesante de esta investigación es que los humanos no son los únicos primates con una división asimétrica del trabajo entre los hemisferios del cerebro.
A través de comparaciones con la asimetría funcional en macacos, los autores de este estudio descubrieron que, en particular, las conexiones entre las redes cerebrales, dentro de los dos hemisferios, son muy similares en monos y humanos.
Sin embargo, la asimetría en las áreas de funciones cognitivas superiores, incluidos los centros del lenguaje, es significativamente mayor en los humanos que en los simios, concluyen los investigadores, que publican sus resultados en la revista eLife.
Fuente: Tendencias21