Logran alterar el cerebro de una especie para que se comporte como otra
Aunque suene a ciencia ficción, un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Georgia ha sido capaz de alterar las conexiones neuronales de un nudibranquio (un molusco gasterópodo cuya forma recuerda a una mezcla entre babosa y alga de mar) para conseguir que imiten a los de una especie distinta.
El objetivo del experimento era que este molusco (‘Dendronotus iris’) nadara como lo hace normalmente, pero usando sus neuronas tal y como las emplea otra especie similar de babosa marina (‘Melibe leonina’).
Para ello, el equipo empleó un extracto vegetal tóxico llamado curare que paralizó las conexiones entre las neuronas del molusco, impidiendo que su cerebro produjese la serie de impulsos que le permitiría nadar. Después, el grupo de científicos empleó electrodos para estimular artificialmente las conexiones entre las células cerebrales de la babosa, siguiendo las rutas de la otra especie. Y el molusco nadó.
«Este y otros estudios nos muestran que la conectividad de los circuitos de dos especies distintas de babosas marinas difieren sustancialmente el uno del otro a pesar de que tienen neuronas y comportamientos homólogos”, explica Paul Katz, uno de los autores del estudio.
Su experimento, cuyos resultados se publican en la revista ‘Current Biology’, también prueban que el cerebro de una especie puede manipularse para conseguir un comportamiento habitual en ella pero utilizando conexiones neuronales diferentes.
Fuente: tecnoxplora.com