Si todo sale como se ha anticipado, el antiguo laboratorio espacial chino, Tiangong-1, caerá en la Tierra en cualquier momento de este fin de semana.
Con sus 10 metros de envergadura y un peso de 8 toneladas, el laboratorio es más grande que la mayoría de los objetos creados por el hombre para el espacio y que reingresan a la atmósfera terrestre.
Y China ha perdido su comunicación con el módulo, por lo que el descenso no podrá ser controlado.
Sin embargo, los expertos han señalado que hay poco riesgo de que la estación espacial termine sobre una localidad poblada.
«Hay varias campañas de control por parte de los radares que hay en la superficie», le dijo a la BBC Richard Crowther, jefe de ingenieros de la Agencia Espacial de Reino Unido.
«Se espera que la mayor parte del módulo se incendie durante el reingreso, con una gran probabilidad de que los fragmentos que sobrevivan caigan al mar», agregó.
Mientras esperamos, en BBC Mundo te presentamos tres cosas que necesitas saber sobre Tiangong-1.
1. ¿Qué es el Tiangong-1?
El módulo espacial fue lanzado en 2011 con el objetivo de explorar la posibilidad de crear un puerto y lugar de reuniones espaciales en la órbita de la Tierra.
Forma parte de un plan de China de tener más puertos espaciales permanentes dentro de los próximos 10 años. Su nombre en chino se traduce como «Palacio Celestial».
Durante este tiempo fue visitado por varios astronautas chinos, entre ellos las primeras mujeres del país enviadas en misión espacial, Liu Yang y Wang Yaping.
Una de las principales cualidades de este laboratorio espacial son sus dimensiones, (10 metros de envergadura y 8 toneladas de peso), aunque no es el de mayor tamaño que ha caído desde el espacio en situaciones similares.
En 1979, la estación espacial Skylab, que pesaba cerca de 80 toneladas, también cayó de forma parcialmente incontrolada.
Parte de los fragmentos impactaron varios terrenos en el oeste de Australia, pero no hubo personas heridas como consecuencia.
2. ¿Por qué va a caer Tiangong-1?
Se suponía que el laboratorio espacial sería sacado de la órbita terrestre de una forma controlada.
La intención era usar sus propulsores para conducirlo a una zona remota en el océano Índico. Pero en 2016 se perdió el control sobre el módulo, lo que impidió que se reactivaran sus motores y lo que, a su vez, precipitó su caída.
Unas 13 agencias espaciales, lideradas por la Europea, ahora están siguiendo el curso de Tiangong alrededor del planeta, dedicadas a crear un modelo de su ruta mientras inicia su descenso a la atmósfera.
El colectivo, conocido como Comité de Coordinación de Restos Espaciales (IADC, por sus siglas en inglés), está tratando de predecir la hora y el lugar en el que el laboratorio va a impactar sobre la superficie terrestre.
Pero sólo unas pocas horas antes de su caída se podrán precisar estos detalles definitivos.
«La certeza de que va a caer en un rango de una hora solo la vamos a tener cuatro horas antes de que eso ocurra. Y una hora todavía significa una vuelta más alrededor de la Tierra», explicó Holger Krag, el director de la oficina de restos espaciales de la Agencia Espacial Europea.
3. ¿Va a caer en sobre alguna ciudad?
Krag señaló que, aún en este escenario incierto, hay riesgos que han sido descartados.
El cálculo «excluye a muchos países e incluso a algunos continentes como posibles lugares donde vayan a impactar los fragmentos», agregó.
Y en ese espectro de opciones, también se puede señalar que no caerá más allá de 43 grados desde el Ecuador, tanto hacia el norte como hacia el sur.
Eso comprende una región que llega hasta el mar Mediterráneo hacia el norte y hasta la isla de Tasmania hacia el sur, por ejemplo.
Este espectro está determinado por la inclinación con la que fue lanzado Tiangong en 2011.
Esto se debe a que China tiene limitadas posibilidades de rastrear sus objetos en el espacio y no tiene más opciones que mantenerlos en una cerrada circulación alrededor de la línea del Ecuador.
En contraste, la Estación Espacial Internacional alcanza los 52 grados tanto para el sur como para el norte.
Aunque cerca de 5.200 millones de personas viven en la zona de reingreso prevista, la mayor parte de esta región es océano, lo que explica la alta probabilidad de que cualquier fragmento del módulo espacial que sobreviva el reingreso golpee directamente el agua.
Y habrá que agradecerle a la fricción del reingreso a la atmósfera por eso.
«Sabemos por eventos similares que en promedio sólo entre el 20% y el 40% de la masa inicial del artefacto va a sobrevivir al extremo calor del reingreso», explicó Krag.
«Así que creemos que entre 1,5 toneladas y 3,5 toneladas van a superar el proceso y van a caer sobre alguna parte del globo», señaló el científico.
¿Y qué es lo que podría aterrizar sobre la Tierra?
Principalmente, los tanques del módulo. Por lo general estos compartimientos logran evitar el fuerte calor de la fricción contra la atmósfera debido a que están muy bien protegidos por otras partes del artefacto.
Fuente: bbc.com