La pastilla de la universidad de Harvard y el MIT que puede revertir los efectos de la edad
Un equipo de investigadores ha descubierto un nuevo tratamiento que abre la puerta a revertir los efectos del envejecimiento para todo el mundo con una sola píldora
La posibilidad de revertir el envejecimiento puede estar más cerca que nunca gracias a un nuevo descubrimiento de un equipo de biólogos de Harvard y el MIT. Los investigadores han encontrado un grupo de moléculas que juntas son capaces de rejuvenecer las células envejecidas, abriendo la puerta a tratar enfermedades relacionadas con la edad, como el alzhéimer o el párkinson, y a regenerar el cuerpo por completo con solo una pastilla.
«Hasta hace poco, lo máximo que podíamos hacer era retrasar el envejecimiento. Nuevos descubrimientos sugieren que ahora podemos revertirlo», afirma David A. Sinclair, catedrático del Departamento de Genética y codirector del Centro Paul F. Glenn de Investigación en Biología del Envejecimiento de la Facultad de Medicina de Harvard y científico principal del estudio publicado en la revista Aging. «Hasta ahora, este proceso requería terapia génica, lo que limitaba su uso generalizado».
La nueva técnica se basa en los descubrimientos del doctor japonés Shinya Yamanaka en el campo de las células madre, por los que obtuvo el premio Nobel de Medicina en 2012. Yamanaka y el doctor John B. Gurdon consiguieron reprogramar células normales para que se convirtieran en pluripotenciales, esto es, células madre que tienen la capacidad de desarrollarse en cualquier tipo de célula especializada. El descubrimiento de Yamanaka y Gurdon ha ayudado a los científicos a desarrollar nuevas técnicas muy prometedoras que han conseguido, por ejemplo, crear estructuras de células que tienen la capacidad de reparar la médula espinal o restablecer la producción de insulina en diabéticos.
Los investigadores de Harvard ya habían tenido éxito en el pasado aplicando los genes de Yamanaka en células para revertir su envejecimiento sin provocar su crecimiento desordenado, algo que potencialmente, dicen, puede convertirlas en cancerosas. Los estudios se realizaron en diversos tejidos y órganos, como el nervio óptico, el cerebro, los riñones y los músculos, y han arrojado resultados muy prometedores. El tratamiento consiguió prolongar la vida útil en ratones y mejorar su visión. Además, los experimentos realizados el pasado abril han conseguido regenerar la visión de monos en las pruebas de laboratorio.
Un tratamiento químico y no genético
En el nuevo estudio, los científicos buscaron distintas moléculas que pudieran funcionar conjuntamente para revertir el envejecimiento celular y rejuvenecer las células humanas. Para comprobar el efecto de las moléculas en las células, el equipo de biólogos contrastó sus efectos en células jóvenes, viejas y senescentes. La senescencia es el proceso que sufren algunas células cuando su ADN está dañado y no pueden activar su proceso de autodestrucción. Estas células se quedan en nuestro organismo y contribuyen al envejecimiento y al desarrollo de enfermedades relacionadas con la edad, como el alzhéimer, la diabetes o algunos tipos de cáncer.
El equipo identificó seis combinaciones químicas que podían devolver las células a sus estados juveniles, y en las pruebas con ratones lograron revertir su edad en menos de una semana. Los investigadores aseguran que el descubrimiento allana el camino hacia una medicina regenerativa que, potencialmente, puede tratar eficazmente las enfermedades relacionadas con la edad, recuperar con más eficiencia las lesiones y hacer realidad el sueño del rejuvenecimiento de todo el cuerpo.
Además, el nuevo tratamiento establece una alternativa química a las actuales terapias genéticas antienvejecimiento que supondría, dicen, la posibilidad de reducir los costes y acortar los plazos de desarrollo del medicamento. Tras los buenos resultados obtenidos con monos recientemente, los investigadores ya están preparando el terreno para realizar ensayos clínicos en humanos.
«Este nuevo descubrimiento ofrece la posibilidad de revertir el envejecimiento con una sola píldora, con aplicaciones que van desde la mejora de la vista hasta el tratamiento eficaz de numerosas enfermedades relacionadas con la edad», asegura Sinclair.
Fuente: elconfidencial.com