La ciencia lo confirma: esto es lo que le puede ocurrir a tu perro si le das de comer pan todos los días
Los expertos reconocen que este alimento no es el más recomendable para incluir en una dieta a diario
El pan es uno de los alimentos más comunes en la dieta humana. Está en la mesa de muchas personas cada día, en forma de tostadas, sándwiches o simplemente como acompañamiento. Sin embargo, cuando se trata de nuestros perros, los expertos advierten que no siempre es buena idea compartir este alimento tan cotidiano.
Según un estudio comparativo de Sycil Vet, aunque pueda parecer inofensivo, el pan puede tener efectos negativos en la salud de los perros si se consume en exceso. “Los perros pueden comer pan, pero solo con moderación”, explican los especialistas.
Esto significa que, si tu perro te mira con cara de antojo, darle un pedacito de pan blanco o integral no le hará daño, siempre que sea sin ingredientes añadidos, explican. Sin embargo, eso no lo convierte en una buena opción para su dieta.
Según detallan los expertos, el principal problema está en los panes que incluyen «extras» como nueces, pasas, cebolla, ajo, chocolate o incluso edulcorantes como el xilitol. Todos estos ingredientes pueden ser altamente tóxicos para los perros. «Los panes con chispas de chocolate, pasas, cebollas y ajo… pueden contener xilitol, así que asegúrate siempre de verificar muy bien los ingredientes», advierten desde Purina.
Además, el pan no aporta valor nutricional significativo para los perros. Y es que este alimento es alto en carbohidratos y puede favorecer el aumento de peso si se da con frecuencia. Por ello, según aclaran los veterinarios es importante recordar que el pan solo debe constituir el 10% o menos de la dieta de tu perro.
Por otro lado, los cachorros tampoco están exentos de riesgos. Aunque pueden comer pequeñas cantidades de pan, esto no les aporta beneficios y podría afectarles ya que además se desconoce si tienen alguna alergia alimentaria.
Según señalan los expertos, otro riesgo poco conocido es el consumo de masa de pan cruda. La fermentación en el estómago del perro puede hacer que la masa se expanda, generando malestar abdominal e incluso intoxicación por alcohol, debido al etanol que se libera durante el proceso. Los síntomas pueden incluir vómitos, debilidad, hinchazón e incluso convulsiones.
Sin embargo, cabe destacar que el pan simple, como el blanco o integral sin semillas ni aditivos, puede darse ocasionalmente, pero sin convertirse en una rutina. No obstante, panes como el de ajo o los untados con mantequilla deben evitarse por completo.
Así que aunque un pequeño trozo de pan sin apenas ingredientes no debería causar daño, lo mejor es no convertirlo en un hábito. En su lugar, es preferible ofrecer opciones más saludables con alimentos que tenemos en casa, aunque siempre que tengas dudas, consulta con tu veterinario. Tu perro te lo agradecerá con salud.
Fuente: elespanol.com