Herramientas de hace 3 millones de años no fueron hechas por humanos, sugiere estudio

Arqueólogos hallaron evidencia de que estos artefactos de piedra fueron elaborados por una especie que no forma parte de nuestros antepasados

En una excavación en la orilla del lago Victoria (Nyayanga, Kenia), un equipo de arqueólogos ha descubierto herramientas que datan de entre 2, 6 y 3 millones de años, lo que las coloca entre las más antiguas jamás encontradas. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención de los investigadores es que probablemente no fueron fabricadas por humanos.

Junto a los 330 artefactos utilizados para cortar y triturar carne, y material vegetal, los investigadores encontraron muelas de Paranthropus, un primate homínido que no forma parte de nuestros antepasados.

Los hallazgos del estudio, publicados en la revista Science, refuerzan las teorías de que los homínidos fuera del género humano (Homo) también usaban herramientas de piedra.

Un homínido no humano

El género Homo está compuesto por los Homo sapiens (nosotros); sus primos contemporáneos, como los neandertales y los denisovanos; y sus ancestros Homo habilis, Homo erectus, Homo antecessor, entre otros. Asimismo, se estima que sus primeros orígenes se remontan a hace 2,5 millones de años.

Antes de ello, existieron los Australopithecus, homínidos bípedos que habitaron África desde hace más de cuatro millones de años y se dividieron en Homo y otros géneros que terminaron extinguiéndose mucho antes de la aparición del hombre moderno. Uno de esos fue el Paranthropus.

Los Paranthropus eran homíninos de mandíbula musculosa que, según hipótesis anteriores, no necesitarían apoyarse en herramientas para ingerir sus alimentos.

“La suposición entre los investigadores ha sido durante mucho tiempo que solo el género Homo, al que pertenecen los humanos, era capaz de fabricar herramientas de piedra”, dijo el autor principal Rick Potts, del Museo Nacional Smithsonian de Historia Natural.

“Encontrar a Paranthropus junto a estas herramientas de piedra abre un misterio fascinante”, afirma.

Herramientas sofisticadas

El análisis de los patrones de desgaste de las herramientas y los huesos de animales hallados en Nyayanga demuestra que estos utensilios de piedra fueron usados para procesar una amplia gama de materiales y alimentos, como plantas, carne e incluso médula ósea. Las herramientas de piedra desenterradas incluyen tres tipos: martillos, núcleos y lascas.

Estas se producían sistemáticamente y a menudo se moldeaban utilizando lo que se conoce como “percusión a mano alzada”; es decir, el núcleo se sujetaba con una mano y luego se golpeaba con un martillo que se manejaba con la mano contraria en el ángulo justo para producir una lasca, una técnica que requiere mucha destreza y habilidad.

“Con estas herramientas se puede triturar mejor que con los molares de un elefante y cortar mejor que con los caninos de un león”, apunta Potts.

De acuerdo con el estudio, los artefactos tienen todas las características sofisticadas de la tecnología olduvayense, cuyos ejemplares más antiguos hasta ahora databan de hace 2,6 millones de años.

“La tecnología olduvayense fue como desarrollar de repente un nuevo juego de dientes fuera de tu cuerpo, y abrió a nuestros antepasados una nueva variedad de alimentos en la sabana africana”, señala Potts.

De hecho, en el yacimiento había al menos tres hipopótamos. Dos de estos esqueletos incompletos incluían huesos que mostraban signos de carnicería.

Thomas Plummer, otro de los autores, explica que también hallaron huesos de antílope que mostraban indicios de que los homínidos habían cortado la carne con lascas de piedra o que habían sido aplastados con martillos para extraer el tuétano.

Hasta ahora, las herramientas de piedra más antiguas conocidas son las del sitio Lomekwi 3, al norte de Kenia, cuya antigüedad se remonta a hace 3,3 millones de años. No obstante estos utensilios no tenían la sofisticación ni la variedad de la tecnología olduvayense.

¿Cómo eran los Paranthropus?

Paranthropus es un género extinto de homínidos bípedos que surgió en África oriental. Aunque su estructura corporal no varió mucho con respecto a sus ancestros (australopithecus), al vivir en un ambiente más seco que sus antecesores, estos evolucionaron para tener un aparato masticador más potente que les permitiera comer raíces y tallos. Su estructura corporal, sin embargo, no cambió significativamente.

Los arqueólogos han registrado tres de tipos de especies dentro del género paranthropus: p. aethiopicus, p. robustus, y p. boisei, el más especializado de todos.

El término de Paranthropus, acuñado por el médico y paleontólogo sudafricano Robert Broom en 1938, significa ‘al lado del hombre’, en alusión a que son una rama que no condujo a la aparición del género Homo.

Fuente: larepublica.pe