La ubicación y ofrendas de un esqueleto de mujer inca en Pucará de Tilcara llevaron a los investigadores a afirmar que ésta habría tenido un destacado prestigio social, informan hoy medios de prensa.

Las características del hallazgo de los restos revelan que la fémina habría formado parte de un grupo de élite originario de otra región del Tawantinsuyu y se trasladó hasta la antigua fortaleza estratégicamente ubicada en Quebrada de Humanahuca.

Clarisa Otero, líder de la investigación, comentó que el desplazamiento de la mujer pudo darse ante la embestida española en la región a finales del siglo XVI.

Aunque el hallazgo fue en el año 2016, cuando se pensaba que era el cuerpo de un artesano, es ahora que el análisis de las evidencias propicia la nueva hipótesis de que la fallecida tenía un importante rol en la población prehispánica.

Junto al cadáver se encontraron piezas de cerámica, huesos de animales, dos morteros con adherencias de cobre y hematita, placas de metal, fragmentos de collares, pigmentos y un tubo hecho con un hueso que pudo ser parte de un instrumento musical o un utensilio para inhalar alucinógenos.

Un informe del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas destacó que esa región fue uno de los pocos territorios que no sufrió una colonización inmediata, pues los pobladores resistieron durante más de seis décadas la invasión europea.

Fuente: PL