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Dónde esconderte (y qué hacer) si explota una bomba nuclear cerca de donde vives

Este es uno de esos consejos que espero nunca llegues a necesitar, pero de igual forma deberías conocer. Un ataque nuclear es la peor pesadilla de todo el mundo y sus consecuencias inmediatas son tan malas como la detonación, o incluso peor. Esto es lo que debes hacer si sobrevives a la explosión.

Sabrás que una bomba nuclear ha detonado cerca de ti si de repente ves un destello de luz blanca y brillante, el cual podría encandilarte durante algunos segundos si te encuentras a 80 kilómetros o menos de la zona cero. Si esa ceguera desaparece y puedes ver con normalidad (y no sientes una paz y calma repentina), quiere decir que sigues con vida. Otras señales de que una explosión nuclear se ha llevado a cabo cerca de donde te encuentras son las quemaduras de primer a tercer grado, las cuales se desarrollan si estás a menos de 16 kilómetros de distancia. La mejor señal es, por supuesto, si ves una nube con forma de hongo en el horizonte.

Michael Dillon, un investigador del Laboratorio Nacional Lawrence Livermore, recomienda que busques refugio tan pronto te percates de lo que ha sucedido, con la finalidad de escapar de la lluvia radiactiva (la caída de partículas radiactivas desde la atmósfera, procedentes de una explosión nuclear). En su estudio, publicado en el informe Proceedings of the Royal Society A: Mathematical, Physical and Engineering Sciences, Dillon recomienda esconderse dentro de un recinto con el material de construcción más denso posible. Mientras más gruesas sean sus paredes, mejor.

Por ejemplo, puedes esconderte dentro de un edificio construido con ladrillos resistentes o estructuras de cemento (o concreto) que no tengan ventanas, en el sótano o subsótano de un edificio. Al esconderse en un sitio así solo estarás expuesto a un 1/200 de la radiación a la que estarías expuesto en el exterior. Evidentemente, el lugar más ideal es un refugio antibombas, pero la mayoría no estamos cerca de alguno.

Las estructuras de madera, como la mayoría de casas y edificios de un piso, no son buenos refugios a la lluvia radiactiva. ¿Es mejor que estar a la intemperie? Un poco, sí, pero Dillon recomienda que te muevas a una mejor ubicación cuando sea posible. Si puedes correr hacia un refugio más denso y protector exponiéndote durante cinco minutos o menos, hazlo. Si para llegar a ese sitio tienes que estar expuesto durante 15 minutos a la radiación, quédate donde estás y espera al menos una hora antes de moverte. Una buena parte de la lluvia radiactiva habrá pasado durante ese tiempo.

Mientras esperas en tu refugio denso y con paredes gruesas, la EPA (Agencia de Protección Ambiental) sugiere que te mantengas alejado de cualquier ventana o puerta y que te duches o limpies las partes de tu cuerpo expuestas con un paño húmedo. Almacena toda la ropa que llevas puesta en una bolsa de plástico y aléjala de ti y otras personas, porque seguramente está contaminada. Al ducharte usa champú y jabón, pero no frotes con fuerza tu piel. Tampoco es recomendable usar acondicionador, debido a que hará que el material radiactivo se mantenga en tu cabello. Una vez estés limpio sopla tu nariz, limpia tus párpados, pestañas y orejas para eliminar cualquier residuo radiactivo.

Por último, asegúrate de beber solamente agua embotellada y comer alimentos que provengan de contenedores sellados, hasta que un equipo de rescate te encuentre. Mientras esperas ayuda puedes escuchar la radio para mantenerte al tanto de los lugares en los que puedes encontrar ayuda y otros refugios instalados por el gobierno.

Fuente: gizmodo.com