Más de 20 tipos de aminoácidos, considerados uno de los pilares de la vida, han sido detectados en las muestras del remoto asteroide Ryugu traídas a la Tierra por la sonda espacial japonesa Hayabusa2 hace tres años y cuyos análisis continúan.
Estos nuevos detalles hasta hora desconocidos sobre los resultados de la investigación a la que se está sometiendo a las muestras se filtraron este lunes a través del Ministerio nipón de Educación, Cultura, Deportes, Ciencia y Tecnología (MEXT).
Según fuentes ministeriales, que calificaron el hallazgo como un logro importante en la investigación, los ocho equipos que están realizando los análisis se encuentran en la fase de recopilación de los resultados de sus pesquisas y se espera que un informe oficial sea publicado próximamente, de acuerdo a la cadena pública NHK.
Es la primera vez que se confirma la presencia de aminoácidos en un asteroide que se encuentra en el espacio, según las autoridades niponas.
Tras un viaje de seis años y 5,200 millones de kilómetros, la Hayabusa2 dejó caer el 6 de diciembre de 2020 sobre Australia un contenedor con una pequeña cantidad de polvo y gas del asteroide.
Hayabusa2, lanzada en un cohete en 2014, hizo contacto dos veces con la superficie de Ryugu en 2019 para recoger las muestras en una compleja ye histórica operación.
Los materiales se enviaron a la Tierra en una cápsula que no estuvo expuesta en ningún momento al aire exterior y sin que hubieran estado erosionados por la luz solar o los rayos cósmicos.
Los primeros análisis, realizados en un laboratorio de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón (JAXA) situado en la localidad de Sagamihara (al suroeste de Tokio), pocos días después de que el contenedor aterrizara en la Tierra, confirmaron que el gas derivaba del remoto asteroide. Los análisis continuaron después.
El material es interesante para avanzar en el conocimiento del origen de nuestro sistema solar, encontrar detalles sobre la propia formación de Ryugu (hace 4,600 millones de años) y comprender mejor su afinidad con las condritas carbonáceas, un tipo de meteorito que se cree que podrían estar vinculados al origen de la vida en el universo y la posible presencia de vida orgánica en otros planetas.
Existen varias teorías sobre la aparición de la vida en la Tierra. Unas señalan que surgió poco a poco a partir de moléculas inorgánicas que dieron paso a compuestos orgánicos como los aminoácidos, mientras que otras plantean la hipótesis de que los compuestos orgánicos podrían haber llegado en meteoritos.
Fuente: EFE