Investigadores de la Universidad de Cambridge revelaron que las anacondas alcanzaron su tamaño máximo hace 12.4 millones de años y han permanecido gigantes desde entonces, a pesar de la extinción de otros reptiles
Un grupo de investigación liderado por la Universidad de Cambridge examinó fósiles de anacondas gigantes encontrados en Sudamérica y determinó que estas serpientes alcanzaron su tamaño completo hace aproximadamente 12.4 millones de años. Según su análisis, las anacondas han permanecido excepcionalmente grandes desde entonces.
Durante el período de 12.4 a 5.3 millones de años atrás, conocido como el ‘Mioceno Medio a Superior’, muchos animales crecieron mucho más que sus contrapartes modernas. Este aumento de tamaño fue influenciado por temperaturas globales más altas, humedales extensos y abundantes fuentes de alimento.
A pesar de que varios de estos gigantes del Mioceno, como el caimán de 12 metros (Purussaurus) y la tortuga de agua dulce gigante de 3.2 metros (Stupendemys), eventualmente desaparecieron, las anacondas (Eunectes) persistieron como una línea de gran tamaño en lugar de encogerse o extinguirse.
Medición de fósiles para revelar el tamaño antiguo de las serpientes
Las anacondas modernas son algunas de las serpientes más pesadas y largas que existen. Generalmente crecen entre cuatro y cinco metros, y en raras ocasiones pueden alcanzar los siete metros.
Para comparar los tamaños antiguos y modernos, los investigadores examinaron 183 segmentos de columna vertebral fosilizados pertenecientes a al menos 32 anacondas individuales. Estos fósiles fueron descubiertos en el Estado de Falcón en Venezuela. Al combinar estas mediciones con datos fósiles de otros sitios sudamericanos, concluyeron que las anacondas antiguas medían aproximadamente entre cuatro y cinco metros, un tamaño comparable al de las serpientes actuales.
Los hallazgos fueron publicados el 1 de diciembre en el Journal of Vertebrate Paleontology.
Por qué las anacondas sobrevivieron como gigantes
«Otras especies como cocodrilos gigantes y tortugas gigantes se han extinguido desde el Mioceno, probablemente debido a temperaturas globales en enfriamiento y hábitats en reducción, pero las anacondas gigantes han sobrevivido; son súper resilientes», afirmó Andrés Alfonso-Rojas, estudiante de doctorado y becario de Gates Cambridge en el Departamento de Zoología de la Universidad de Cambridge y autor principal del estudio.
Continuó: «Al medir los fósiles, encontramos que las anacondas evolucionaron un gran tamaño corporal poco después de aparecer en Sudamérica tropical hace 12.4 millones de años, y su tamaño no ha cambiado desde entonces», dijo Alfonso-Rojas.
Para confirmar sus mediciones, Alfonso-Rojas aplicó una segunda técnica llamada ‘reconstrucción del estado ancestral’. Este método utiliza un árbol genealógico de serpientes para inferir las longitudes corporales de las anacondas antiguas y especies modernas relacionadas como las boas arborícolas y las boas arcoíris. El análisis respaldó la conclusión de que las primeras anacondas promediaban entre cuatro y cinco metros cuando emergieron por primera vez durante el Mioceno.
Hábitats antiguos y sobrevivientes modernos
Las anacondas actualmente habitan en humedales, pantanos y ríos importantes, incluyendo el Amazona. Durante el Mioceno, el norte de Sudamérica se asemejaba mucho a la actual cuenca del Amazonas, lo que permitió a las anacondas ocupar un rango mucho más amplio. Aunque su distribución se ha contraído desde entonces, aún quedan suficientes hábitats adecuados, junto con presas como capibaras y peces, para mantener su tamaño grande.
Los científicos asumían previamente que las anacondas antiguas habrían sido incluso más grandes que las modernas porque las serpientes son altamente sensibles a la temperatura y el clima del Mioceno era más cálido. Alfonso-Rojas abordó esto directamente: «Este es un resultado sorprendente porque esperábamos encontrar que las anacondas antiguas medían siete u ocho metros. Pero no tenemos evidencia de una serpiente más grande del Mioceno cuando las temperaturas globales eran más cálidas».
Mejor evidencia fósil arroja luz sobre el tiempo evolutivo
Antes de este proyecto, los investigadores carecían de suficiente material fósil para determinar exactamente cuándo las anacondas desarrollaron su enorme tamaño. Dado que estas serpientes tienen más de 300 vértebras, el tamaño de las vértebras fosilizadas individuales ofrece una forma confiable de estimar la longitud total del cuerpo.
Los fósiles analizados en este estudio fueron recolectados durante varias temporadas de campo por colaboradores de la Universidad de Zúrich y el Museo Paleontológico de Urumaco en Venezuela.
Fuente: cadena3.com


Deja una respuesta