Del 11 al 13 de diciembre podrá observarse desde México la lluvia de Gemínidas

Las noches del 11 al 13 de diciembre de 2019 en México será posible observar la lluvia de meteoros impactante del año: las Gemínidas.

Éstas, de acuerdo con la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), están activas cada diciembre, cuando la Tierra pasa a través de un enorme sendero de escombros arrojados por un objeto extraño y rocoso llamado 3200 Phaethon, el cual desprende polvo y arena que se queman al entrar a la atmósfera de la Tierra, lo que produce una ráfaga de estrellas fugaces visibles en la Tierra.

La mayoría de las lluvias de meteoritos visibles en la Tierra son arrojadas por los cometas cuando sus órbitas llegan al Sistema Solar, pero lo que hace especiales a las Gemínidas es que éstas son escombros de una ruptura o colisión que sucedió hace mucho tiempo, según la NASA.

¿Cómo ver la lluvia de Gemínidas?

Los cielos oscuros y claros son el ingrediente más importante para observar lluvias de meteoritos, por lo que las ciudades no son una opción a causa de la contaminación lumínica. Descartando las zonas urbanas, cualquier ubicación es buena para apreciar las Gemínidas.

Una vez encontrado el sitio perfecto, a partir de las 10:30 de la noche, deberás darle a tus ojos unos 30 minutos para adaptarse a la oscuridad, sin luces, celulares o aparatos que pudieran arruinar la armonía de la visión nocturna.

Acuéstate boca arriba y mira hacia arriba, observando tanto cielo como sea posible. Según la NASA, a medida que avanza la noche, el número de Gemínidas visibles irá en aumento, alcanzando su punto máximo de 100 estrellas hora alrededor de las 2 de la mañana.

Las Gemínidas desafían cualquier explicación

“De todos los torrentes de escombros a través de los cuales pasa la Tierra anualmente, el de las Gemínidas es por mucho el más masivo”, comenta el astrónomo de la NASA Bill Cooke, a través del sitio oficial de la agencia.

“Si sumamos todo el polvo del torrente de las Gemínidas, fácilmente sobrepasa la masa de otros torrentes por factores que van desde 5 hasta 500 veces. Esto las convierte en el ‘peso pesado’ de las lluvias de meteoros”, explica.

Si bien el 3200 Phaethon es el origen de este fenómeno, su procedencia no está del todo clara para los científicos de la NASA.

Al 3200 Phaethon se le describe como un asteroide cercano a la Tierra, o como un cometa extinto, pero cerca de él hay otro asteroide tipo Apollo llamado 2005 UD, el cual se encuentra en una órbita similar a Phaethon, por lo que la NASA especula que ambos pertenecieron a un cuerpo más grande que se separó o colisionó.

Fuente: tecreview.tec.mx