Científicos revelan cómo podría morir el sistema solar en una nueva investigación
Señalan que el sistema solar podría ser atraído por la gravedad de una estrella enana blanca, aplastado y convertido en polvo
Nuestro sistema solar podría ser atraído por la gravedad de una estrella enana blanca, aplastado y convertido en polvo, según dieron a conocer recientemente científicos de la Universidad de Warwick.
Astrofísicos de la Universidad de Warwick y otras instituciones han contribuido a dilucidar qué les ocurre a los sistemas planetarios, como nuestro sistema solar, cuando sus estrellas anfitrionas, como el Sol en nuestro caso, se convierten en enanas blancas.
De acuerdo con los expertos, las enanas blancas son el estado final de las estrellas cuando han quemado todo su combustible, lo que permite comprender distintos aspectos de la formación y evolución estelar.
En el estudio, que se publicó en la revista Monthly Notices of the Royal Astronomical Society (MNRAS), los investigadores estudiaron el destino de los asteroides, lunas y planetas que pasan cerca de las enanas blancas, analizando los tránsitos, que son disminuciones del brillo de las estrellas causadas por objetos que pasan por delante de ellas.
A diferencia de los tránsitos predecibles causados por planetas en órbita alrededor de estrellas, los tránsitos causados por escombros tienen formas extrañas, caóticas y desordenadas. Esto sugiere que el destino de estos cuerpos es extremadamente catastrófico y violento.
El doctor Amornrat Aungwerojwit, de la Universidad de Naresuan, que dirigió el estudio, declaró: “Investigaciones anteriores habían demostrado que cuando asteroides, lunas y planetas se acercan a enanas blancas, la enorme gravedad de estas estrellas desgarra estos pequeños cuerpos planetarios en pedazos cada vez más pequeños”.
Las colisiones entre estos trozos acaban triturándolos hasta convertirlos en polvo, que finalmente cae en la enana blanca, lo que permite a los investigadores determinar de qué tipo de material estaban hechos los cuerpos planetarios originales.
En esta nueva investigación, los científicos investigaron los cambios de brillo de las estrellas durante 17 años, arrojando luz sobre cómo se alteran estos cuerpos. Se centraron en tres enanas blancas diferentes que se comportaron de forma muy distinta.
El profesor Boris Gaensicke, del Departamento de Física de la Universidad de Warwick, comentó: “El simple hecho de que podamos detectar restos de asteroides, lunas o incluso planetas zumbando alrededor de una enana blanca cada par de horas es alucinante, pero nuestro estudio demuestra que el comportamiento de estos sistemas puede evolucionar rápidamente, en cuestión de unos pocos años”.
“Aunque pensamos que vamos por buen camino en nuestros estudios, el destino de estos sistemas es mucho más complejo de lo que jamás hubiéramos imaginado”.
La primera enana blanca (ZTF J0328-1219) estudiada parecía estable y “se comportaba bien” en los últimos años, pero los autores hallaron indicios de un importante acontecimiento catastrófico en torno a 2010.
Otra estrella (ZTF J0923+4236) se atenúa irregularmente cada par de meses y muestra una variabilidad caótica en escalas de tiempo de minutos durante estos estados más débiles, antes de volver a brillar.
El Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) había demostrado en 2015 que la tercera enana blanca analizada (WD 1145+017) se comportaba de acuerdo con las predicciones teóricas, con grandes variaciones en el número, la forma y la profundidad de los tránsitos. Sorprendentemente, en este último estudio, los tránsitos han desaparecido por completo.
“El sistema es, en general, cada vez más brillante, a medida que el polvo producido por las colisiones catastróficas de 2015 se dispersa”, dijo el profesor Gaensicke. “La naturaleza impredecible de estos tránsitos puede volver locos a los astrónomos: un minuto están ahí y al siguiente han desaparecido. Y esto apunta al entorno caótico en el que se encuentran”.
Cuando se le preguntó por el destino de nuestro propio sistema solar, el profesor Gaensicke dijo: “La triste noticia es que la Tierra será probablemente engullida por un Sol en expansión, antes de que se convierta en una enana blanca”.
“Para el resto del sistema solar, algunos de los asteroides situados entre Marte y Júpiter, y tal vez algunas de las lunas de Júpiter podrían desprenderse y viajar lo suficientemente cerca de la eventual enana blanca como para sufrir el proceso de trituración que hemos investigado”.
Fuente: laprensagrafica.com