Las galaxias formadoras de estrellas son responsables de crear rayos gamma hasta ahora no asociados con un origen conocido, confirma un estudio de la ANU (Australian National University).
El autor principal, el doctor Matt Roth, de la Escuela de Investigación de Astronomía y Astrofísica de la ANU, dijo que hasta ahora no estaba claro qué creó los rayos gamma, una de las formas de luz más energéticas del Universo, que aparecen en parches aparentemente ‘vacíos’ del cielo.
El descubrimiento, que se publica en Nature, podría ofrecer pistas para ayudar a los astrónomos a resolver otros misterios del Universo, como qué tipo de partículas componen la Materia Oscura, uno de los santos griales de la astrofísica.
“Es un hito significativo descubrir finalmente los orígenes de esta emisión de rayos gamma, resolviendo un misterio del Universo que los astrónomos han estado tratando de descifrar desde la década de 1960”, dijo Roth en un comunicado.
“Hay dos fuentes obvias que producen grandes cantidades de rayos gamma que se ven en el Universo. Una cuando el gas cae en los agujeros negros supermasivos que se encuentran en el centro de todas las galaxias, llamado núcleo galáctico activo (AGN), y la otra asociado con la formación de estrellas en los discos de las galaxias.
“Modelamos la emisión de rayos gamma de todas las galaxias del Universo y comparamos nuestros resultados con las predicciones de otras fuentes y descubrimos que son las galaxias formadoras de estrellas las que producen la mayor parte de esta radiación difusa de rayos gamma y no el proceso AGN”.
Los investigadores de ANU pudieron identificar qué creó estos misteriosos rayos gamma después de obtener una mejor comprensión de cómo los rayos cósmicos, partículas que viajan a velocidades muy cercanas a la velocidad de la luz, se mueven a través del gas entre las estrellas. Los rayos cósmicos son importantes porque crean grandes cantidades de emisión de rayos gamma en las galaxias formadoras de estrellas cuando chocan con el gas interestelar.
Los datos del telescopio espacial Hubble de la NASA y el telescopio espacial de rayos gamma Fermi fueron un recurso clave utilizado para descubrir los orígenes desconocidos de los rayos gamma. Los investigadores analizaron información sobre muchas galaxias, como sus tasas de formación de estrellas, masas totales, tamaño físico y distancias de la Tierra.
“Nuestro modelo también se puede utilizar para hacer predicciones de emisión de radio, la radiación electromagnética que tiene una frecuencia similar a la de un radio de automóvil, de galaxias formadoras de estrellas, lo que podría ayudar a los investigadores a comprender más sobre la estructura interna de las galaxias”, dijo Roth.
“Actualmente estamos buscando producir mapas del cielo de rayos gamma que puedan usarse para informar las próximas observaciones de rayos gamma de los telescopios de próxima generación. Esto incluye el conjunto de telescopios Cherenkov, en el que participa Australia.
“Con suerte, esta nueva tecnología nos permitirá observar muchas más galaxias formadoras de estrellas en rayos gamma de las que podemos detectar con los telescopios de rayos gamma actuales”.
Fuente: europapress.es