Así está ayudando la ciencia a lograr que los perros vivan más años

Todos los que hemos tenido perritos sabemos que se vuelven un miembro más de la familia y que, sobre todo los que viven en departamentos, son seres muy dependientes de sus dueños, y expresan su cariño con mucha facilidad.

Lo anterior genera un vínculo entre dueño y perro que se extiende durante toda la vida del can. Lamentablemente, la vida de un perro es, en promedio, mucho más corta que la de sus dueños.

Un perro grande, como un Gran Danes, vive en promedio solo 8 años, mientras que los perros pequeños, como un chihuahueño, alcanzan los 18 años. Edades muy por debajo del promedio de vida de un ser humano.

Curiosamente, varios proyectos científicos están comenzando a experimentar con canes, buscando volver más largas sus vidas. La idea no es solo lograr que nuestros amigos peludos nos acompañen largos años, sino usar sus técnicas en el futuro en humanos.

El secreto de la perra juventud

Desde hace décadas comenzó una carrera por lograr prolongar la vida de los seres humanos.

Yuval Noah Hariari describe esta tendencia en algunos capítulos de su libro Homo Deus, mostrando como grandes emprendedores han gastado parte de sus fortunas en tratamientos que vuelvan más lento el envejecimiento.

Cosas tan raras como inyectarse células madre en el cerebro o sangre de personas más jóvenes se volvió común entre ciertos magnates de Silicon Valley, y es un mercado en crecimiento. Aunque, sigue siendo un campo que se encuentra en una fase muy temprana de desarrollo, y que requiere muchos recursos.

Intentando ser una de las figuras del desarrollo de esta tecnología, la emprendedora y neurocientífica Celine Halioua fundó Cellular Longevity Inc, una empresa asentada en Silicon Valley que busca impactar a través de métodos novedosos para reducir el envejecimiento… de los perros.

“Sin duda, los perros deben considerarse como el mejor modelo para entender el envejecimiento humano. Hemos evolucionado conjuntamente con ellos y comparten nuestro entorno. También, con el paso de los años, ellos desarrollan enfermedades relacionadas con la edad. Si podemos lograrlo (reducir el envejecimiento) con los perros, la gente también se interesará por nuestro método”, indicó Halioua en una entrevista con Bloomberg.

A pesar de no dar detalles de los fármacos que se usarán para prolongar la vida de los perros, se indicó que, según los cálculos de Cellular Longevity Inc, se incrementará su vida entre seis meses y tres años, además de que tendrán menor deterioro y serán más activos en sus años finales de vida.

De inicio, la compañía de Celine Halioua se centrará en prolongar la vida de los perros de talla grande, que, como comentamos líneas arriba, son los que viven menos en promedio.

La idea es comenzar a experimentar con los perros este mismo año y tener aprobado un tratamiento contra el envejecimiento en el 2025.

La lucha contra el envejecimiento

En realidad, ya existen varios tratamientos contra el envejecimiento, pero la mayoría no se han probado por lo complicado de lograr aprobarse, porque -al ser fármacos destinados a la población adulta mayor- la fase de prueba sería muy larga.

Por eso, la mayoría de los proyectos se han centrado, de forma inicial, en experimentar con animales.

Y los perritos han sido uno de los animales que más se han visto apoyados por los expertos en el tema.

Un ejemplo de lo anterior es el National Institutes of Health de Estados Unidos, que destinó 25 millones de dólares para el Proyecto de Envejecimiento del Perro. El proyecto examina cómo los factores genéticos y ambientales afectan los procesos de envejecimiento de los perros, además de realizar pruebas de rapamicina en 200 perros de mediana edad.

La rapamicina, que se utiliza para prevenir el rechazo de trasplantes de órganos y algunos tipos de cáncer, ha demostrado ser un medicamento que retrasa, e incluso revierte, el envejecimiento en prácticamente todos los tejidos donde se ha examinado. Así que podría ser la base para la lucha en contra del envejecimiento.

Lo único malo, es que la rapamicina suele presentar efectos secundarios, el más común es duplicar la probabilidad de diabetes.

Por eso, el equipo a cargo del Proyecto de Envejecimiento del Perro está experimentando con dosis pequeñas en las pastillas que se les da junto con su alimento a los perritos que forman parte del experimento.

Matt Kaeberlein, jefe del Proyecto, sostiene que con su tratamiento podrán aumentar la vida de los perros de 50% a 70 %, además de disminuir el cáncer y las enfermedades óseas degenerativas.

Fuente: televisa.com