Joven innovador peruano logra transformar un desecho local natural para purificar el agua
La minería y la falta de depuración de las aguas fecales, entre otras actividades, contaminan el agua destinada para consumo humano. En Perú, el mal estado del agua que consume su población se ha convertido en un auténtico problema de salud pública. En una de las regiones del país andino, el 99 % de la población usa agua contaminada. Entre las enfermedades que se transmiten por el agua se encuentran el cólera, la fiebre tifoidea, la poliomielitis, la diarrea y la disentería, entre otras. A nivel mundial, 1,5 millones de niños mueren al año por consumir agua contaminada, según Oxfam Intermón.
Consciente del gran problema que supone la contaminación del agua en su país, el químico peruano Daniel Obregón ha desarrollado un método que permite emplear las semillas de una planta amazónica local como filtro del agua. El enfoque se basa en convertir estas semillas en una especie de carbón activo, el material que suele usarse para purificar el agua. De esta forma, además de mejorar el problema del agua, la idea de Obregón contribuye a la economía local y circular del país. Gracias al potencial de este avance, el joven ha sido elegido entre los ganadores de los premios Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2019 de MIT Technology Review en español.
La Mauritia flexuosa o aguaje (como es conocida en Perú) es una palmera con un fruto muy nutritivo. Además, las fibras de su tronco y hojas suelen extraerse para fabricar objetos. Ahora Obregón ha descubierto que el aguaje también se puede utilizar para purificar el agua una vez convertido en carbón activo. Frente a otros materiales, conseguir carbón activo a partir del aguaje requiere menos energía y productos químicos. Una vez sometido a su proceso patentado, sus filtros de carbón activo son capaces de filtrar metales pesados como el cadmio y el mercurio.
De momento el proyecto de Obregón está en fase piloto en el laboratorio, pero, al no haber una industria de producción de carbón activo en Perú, Obregón cree que hay «un gran potencial» para crear numerosos puestos de trabajo en su país, al reaprovechar los restos de este cultivo local cuya producción está creciendo. La cáscara del aguaje representa casi el 80 % del peso del fruto y, de momento, es considerada un desecho. Pero gracias a la innovación de Obregón, ahora podrá ser utilizada para mejorar la calidad del agua en Perú.
El responsable de la Dirección Técnica de Innovación en Alma Consulting Group (España) Alfredo Colombano, miembro del jurado de Innovadores menores de 35 Latinoamérica 2019, considera «innnovador en el material que usa y también el hecho de que puede ayudar a impulsar la industria del carbón activado como método de purificación de agua».
Fuente: technologyreview.es