Este robot acuático recoge la basura que nosotros dejamos en el mar
La gran ironía de la vida es fabricar robots para que limpien el desastre que nosotros mismos hemos provocado. La crisis climática es real y se sabe que en medio del pacífico hay una isla de plástico, así que en lugar de limpiarla nosotros creamos robots que lo hagan por nosotros.
Pero este pequeño robot con forma de barco no va a trabajar allí, sino que se va a encargar de limpiar la basura de los ríos locales. Se espera que dentro de unos años, cuando la tecnología de limpieza de agua esté más avanzada, este tipo de robots puedan salvarnos del mar de plástico que estamos creando hoy.
Este pequeño robot se llama Clearbot y funciona con batería que se carga por luz solar, la descarga la hace de forma automática en su puesto y la carga la hace dirigiendo su boca (que está siempre abierta) hacia la basura que detecta en sus paseos.
La zona de trabajo la tiene geológicamente marcada, aunque también puede usar su cámara y dirigirse a la basura que detecta flotando en el agua. Este barco solo puede navegar hacia delante y hacia detrás, cuenta con varias luces y un peso muy liviano.
El barco robot protagonista de hoy puede almacenar hasta 200 litros de basura y tarda unas 8 horas en limpiar casi 1 kilómetro de superficie. Con una simple carga, puede trabajar alrededor de 48 horas seguidas.
Clearbot está disponible y listo para funcionar, eso sí, no es gratis. Cada robot tiene un coste de 2.000 dólares al mes. Esa cifra traducida a nuestra divisa, ronda los 1.630 euros.
Clearbot está desarrollado por Open Ocean Engineering que tiene su sede en Hong Kong. Es la versión ligera de un barco de grandes dimensiones, solar y específicamente diseñado para recoger basura de ríos y mares.
El hermano mayor de Clearbot se llama Interceptor y es un barco solar que promete recoger 100.000 kilos de basura diarios. Pero se plantea otra duda, ¿a dónde va esa basura? Porque si constantemente vamos a estar arrojando basura, recogiéndola y volviéndola a arrojar… no avanzamos.
Esta barca inteligente, lo que hace es recoger la basura y la deposita en contenedores diferentes para su posterior reciclado. Es un inicio importante, pero también deberíamos plantearnos reducir los desechos, embalajes, plásticos, etc. y usar materiales biodegradables o que se pudieran reutilizar y reciclar mejor.
Sabemos a dónde va a parar la basura que tiramos diariamente en nuestro país, y lo cierto es que tampoco es una solución idónea. La basura que va en el camión tiene varios destinos, pero de una forma u otra termina en nuestros ríos y contaminando nuestros mares.
Durante años hemos ignorado este problema y ahora en pleno océano pacífico tenemos una isla íntegramente de plástico. En el año 2018, ya superaba por 3 el tamaño de Francia. Se espera que uno de estos barcos, o varios, nos ayuden a eliminar los plásticos de nuestros ríos y mares, con el fin de no interferir en la vida marina y no contaminar nuestro planeta.
En la actualidad diversos estudios científicos han corroborado que existen unas bacterias que comen plásticos, y también se ha descubierto una especie de larva o gusano que no deja ni rastro del plástico que le ofrecemos.
Fuente: computerhoy.com