Hoy en día parece imposible ganar dinero en Internet con una idea nueva. Una adolescente de 17 años nos demuestra que nada es imposible si sabes buscar tus oportunidades. Ella vió el negocio, le pidió prestadas 1.500 libras a su padre, y en tres años ha ganado más de 1 millón de euros.

Vivimos tiempos complicados en donde hay que aprovechar cualquier oportunidad para encontrar un buen trabajo y generar dinero. Quizá hayas pensado montar un negocio en Internet, pero parece que todo está inventado. Y si no lo está, te lo copiarán a los diez minutos. Beau Jessup, una joven de 17 años tuvo una idea aparentemente descabellada: cobrar por poner nombres occidentales a los bebés chinos. Y en tres años, ha conseguido hacerse millonaria y mantener su negocio con una decisión genial: la web está en chino pero no en inglés, así que le ha sido más fácil pasar desapercibida.

Según nos cuenta Bussiness Insider a Beau Jessup, hija de una actriz de televisión británica, se le ocurrió la idea cuando solo tenía 15 años y viajó con sus padres a China. Un amigo chino de la familia acababa de tener una hija, y le pidió que le recomendase un nombre occidental para ella.

Beau, sorprendida por la petición, le pidió al padre que le dijese los rasgos que le gustaría que tuviese su hija. Él quería que fuera inteligente, fuerte y decidida, así que a la adolescente se le ocurrió el nombre de Eliza, inspirada por Eliza Doolittle, un personaje del musical My Fair lady. Al empresario chino le encantó y Beau, con solo 15 años, pensó que aquello podría convertirse en un negocio. Lo explica en esta charla en TEDx:

La pregunta obvia que surge enseguida es: ¿por qué los chinos quieren poner nombres occidentales a sus hijos?

Para los asiáticos, la elección del nombre es una tarea muy importante y complicada. Los chinos eligen nombres que tienen significados especiales, formados por dos o tres caracteres chinos. El problema es que fuera de China esos nombres son imposibles de escribir, y difíciles de pronunciar y recordar. Es por eso que la mayoría de las celebridades chinas tienen un nombre occidental alternativo, como el actor Jackie Chan, o Jack Ma, el fundador de AliExpress.

Otro problema añadido es que los emails no aceptan caracteres chinos, así que para hacer compras o registrarse en redes sociales, necesitan usar nombres occidentales. La mayoría acaba recurriendo a su profesor de inglés o apps del móvil que ofrecen nombres tan tontos como Rolex Wang o Gandalf Wu.

Debido a la censura en China y a que muchos chinos no hablan inglés no es fácil encontrar webs que ofrezcan nombres occidentales interesantes pensados para los asiáticos, por eso Beau Jessup, con solo 17 años, decidió crear una web en chino que recomendara nombres occidentales para los bebés chinos. La llamó Special Name:

Beau le pidió a su padre 1.500 libras para montar y diseñar la web, y contrató a técnicos chinos que instalaron la web en China y se encargan de mantenerla.

Su funcionamiento es sencillo: los padres tienen que indicar el sexo del bebé, y elegir cinco rasgos que tiene el recién nacido, o desean que desarrolle: valiente, decidido, tímido, soñador, etc. Con estos datos un algoritmo creado por Beau elige tres nombres, que ofrece a los padres. De esta manera no es la web la que elige el nombre, sino los padres. El precio del servicio es de solo 1,2 euros.

En tres años, Special Name ha puesto nombre occidental a casi 650.000 bebés chinos, y Beau ha ganado 1,2 millones de euros. En una entrevista a News.com.au explica que ha dedicado el dinero a devolver la deuda a su padre, a comprarse una casa y a pagar sus estudios universitarios.

Esta joven emprendedora es un buen ejemplo de que no todo está inventado en Internet. Solo hay que encontrar una idea original, y tener iniciativa para sacarla adelante…

Fuente: computerhoy.com