Un casco de estimulación eléctrica trata la depresión sin fármacos
En Reino Unido ya han puesto a la venta el primer dispositivo de estimulación cerebral para tratar la depresión con la aprobación de la Comunidad Europea. Se trata de un accesorio similar a la estructura de un visor de realidad virtual (aunque sin el visor), que se encarga de aplicar pequeñas descargar eléctricas en la parte frontal del cerebro. Su meta no es otra que mejorar los síntomas de la depresión en los pacientes.
Un casco contra la depresión
Este casco fabricado por Flow Neuroscience se encarga de aplicar descargas sobre el tejido cerebral utilizando Estimulación Transcraneal de Corriente Continua (tDCS), una técnica que ha demostrado mejorar los síntomas de depresión en más de un ensayo. Con la ayuda de una corriente eléctrica de muy baja intensidad (no se nota más allá de un leve hormigueo), el casco trabaja sobre la corteza prefrontal para estimular y equilibrar el área, una zona donde normalmente las personas con depresión tienen una menor actividad en el lado izquierdo y bastante más actividad en el derecho.
Además del casco, los usuarios podrán hacer uso de una aplicación a modo de terapia virtual desde la que obtener recomendaciones para comer mejor, dormir mejor, hacer más ejercicio e incluso meditar. Aunque es cierto que algunos estudios han demostrado que el casco no ofrece resultados, otros muchos sí mostraron efectos similares a los que se consiguen con los antidepresivos, aunque sin ninguno de los muchos efectos secundarios que éstos ofrecen.
El único efecto secundario del tDCS es la aparición temporal de un enrojecimiento en el lugar en el que se colocan los electrodos, seguido de un leve dolor de cabeza, mientras que los antidepresivos suelen crear ansiedad, aumento de peso, fatiga y náuseas. Según sus creadores, el producto debe usarse como un tratamiento de 6 semanas, formado por sesiones de 30 minutos, tres veces a la semana.
¿Cuánto cuesta Flow?
Con el certificado de la Comunidad Europa en su mano, y la aprobación para su uso médico, el casco Flow se puede adquirir desde ya mismo a través de la página oficial del fabricante por 399 libras (unos 460 euros), aunque lamentablemente de momento el producto sólo se envía a Reino Unido y Suecia.
Fuente: elotuput.com