Cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presumió este martes de tener un coeficiente intelectual (CI) más elevado que el de su secretario de Estado, Rex Tillerson, no estaba haciendo más que repetir algo que viene haciendo desde hace tiempo.

En 2013 tuiteó que su CI era superior al de sus antecesores Barack Obama y George Bush, y en otra oportunidad afirmó que el suyo también superaba al del comediante estadounidense Jon Stewart y al de Lord Sugar, la estrella británica del programa de telerrealidad “El aprendiz”.

¿Pero es posible deducirla? Empecemos por definir qué es exactamente el cociente intelectual y cómo se mide.

Ejemplo de preguntas:

1. ¿Cual es el número de 4 dígitos en el cual el primero es un quinto del último, y el segundo y el tercero juntos son iguales al último dígito multiplicado por tres?

2. ¿Cuál es el número que es uno más de un décimo de la quinta parte de la mitad de 4.000?

3. En una carrera, Jerry no salió ni primero ni último. Janet le ganó a Jerry, Jerry le ganó a Pat. Charlie no fue ni primero ni último. Charlie le ganó a Rachel. Pat le ganó a Charlie. ¿Quién salió último?

El cociente o coeficiente intelectual es el puntaje obtenido en una prueba de inteligencia.

No existe una prueba única de CI.

Mensa, la asociación internacional de superdotados afincada en Reino Unido, acepta resultados de más de 200 pruebas, incluyendo una propia.

Mientras que algunos exámenes duran una hora, otros no tienen límite.

Frank Lawlis, psicólogo supervisor de Mensa en EE.UU., explica que los ejercicios evalúan normalmente las habilidades espaciales, cuantitativas y verbales de una persona.

La institución acepta sólo a aquellos cuyo CI está dentro del 2% superior de la población general. Esta gente tiene, en términos generales, un CI de 130.

Bajo y alto

¿Pero en qué medida podemos deducir el CI de Trump a partir de su desempeño y sus declaraciones?

“Si alguna vez llega a publicar su CI, tengo la sensación –sobre todo después de que desafió a Tillerson a revelar el suyo– de que es más alto de lo que se imagina la gente”, le explicó a la BBC Barbara A. Perry, directora de estudios presidenciales de la Universidad de Virginia, en EE.UU.

“La gente a la que no le gusta Trump dice ‘oh, es tan idiota, es tan estúpido’. Pero te apuesto a que su CI es más alto de lo que pensamos”, añade.

A saber: la comunicación pública, la capacidad de organización, la capacidad política, la visión, el estilo cognitivo y la inteligencia emocional.

“La puntuación de Trump es baja en inteligencia emocional, estilo cognitivo, visión y capacidad organizacional”, dice Perry.

“En lo que ha sido magnífico, como para ganar la presidencia, es en su capacidad política y en la comunicación pública”, agrega.

Por otro lado, “ha tenido obviamente una cierta inteligencia innata como para ser exitoso, tal como lo fue”, señala Perry en relación a su carrera empresarial.

También destaca que Trump se graduó en la Escuela Wharton en la Universidad de Pensilvania.

Pero más allá de si es alto o no, Lawlis asegura que el coeficiente intelectual no lo dice todo.

“Si tomas a alguien que está considerado un genio, como Einstein, él probablemente no obtendría buenos resultados en una prueba de CI, porque él pensaba creativamente, fuera de los límites convencionales”.

“Él, probablemente, podría pensar decenas de respuestas para cada pregunta”.

Entretanto, para resolver el dilema, Mensa se ha ofrecido cordialmente a poner a prueba tanto a Trump como a Tillerson.

Respuestas:

1- 1.155

2- 41

3-Rachel

Fuente: BBC