Proponen quemas controladas para evitar incendios forestales como los de Australia
Científicos de Stanford proponen prevenir los grandes incendios forestales, como los que asolan Australia, provocando quemas controladas que limpien los combustibles del suelo.
Necesitamos una expansión colosal de los tratamientos del combustible, señaló Rebecca Miller, autora principal del estudio y alumna de doctorado en el Programa Interdisciplinario Emmett en Medio Ambiente y Recursos de la Escuela de Ciencias de la Tierra, Energía y Medio Ambiente de Stanford.
Estas quemas controladas son efectivas y seguras. California necesita eliminar los obstáculos para su uso con la finalidad de que podamos evitar incendios forestales más devastadores, aseguró Chris Field, coautor de la investigación y director del Instituto para el Medio Ambiente de Stanford Woods y profesor de Estudios Ambientales Interdisciplinarios.
Años de extinción de incendios en California han llevado a acumulaciones masivas de madera y combustibles vegetales en los bosques. Las condiciones más cálidas y secas han exacerbado la situación.Las quemas controladas, en combinación con el aclaramiento de la vegetación que permite que el fuego trepe a la copa de los árboles, han demostrado ser eficaces para reducir los riesgos de incendios forestales.
En rara ocasión escapan de los límites establecidos y tienen beneficios ecológicos que imitan los efectos de los incendios naturales, como la reducción de la propagación de enfermedades e insectos y el aumento de la diversidad de especies, según los autores, que publican su estudio en Nature Sustainability.
Para reducir de manera significativa el número de incendios forestales, California necesita tratamientos con combustibles, ya sean quemas programadas o clarear la vegetación, en unos 80 mil kilómetros cuadrados o casi 20 por ciento de la superficie del estado, explicaron los investigadores en un comunicado.
Si bien las peticiones de quemas controladas en California han aumentado (los acres privados, estatales y federales planificados para el enfoque se duplicaron entre 2013 y 2018), hasta la mitad de esa superficie no se incendió debido a preocupaciones sobre riesgos como el humo resultante, regulaciones desactualizadas y recursos limitados.
Para comprender mejor estas barreras, los investigadores entrevistaron a empleados de los gobiernos federal y estatal, personal legislativo estatal y representantes sin fines de lucro involucrados en el manejo de incendios forestales, así como a académicos que analizan el campo. También revisaron las políticas legislativas y los datos de quema prescritos para identificar barreras y, en última instancia, proponer soluciones.
Casi todos los investigadores entrevistados describieron una cultura de aversión al riesgo a la sombra de las leyes que colocan la responsabilidad financiera y legal por cualquier quema controlada que se escape de los autores.
Los propietarios privados destacaron cómo los temores de bancarrota influyeron para que evitaran quemar sus propiedades. Los empleados de la agencia federal resaltaron la ausencia de agradecimientos o recompensas por realizar incendios controlados, pero castigo por cualquier incendio que se escape. Los trabajadores federales y estatales afirmaron que la opinión pública negativa sigue siendo un desafío.
Las finanzas limitadas, las regulaciones complejas y la falta de personal calificado también son un obstáculo.
California ha tomado algunas medidas significativas para facilitar la quema controlada. La legislación reciente hace que los propietarios privados que se inscriban en un programa de certificación y capacitación o tomen las precauciones apropiadas antes de ella están exentos de responsabilidad financiera por los fuegos programados que se descontrolen. Los nuevos programas de educación pública están mejorando la opinión pública sobre la práctica.
Fuente: EP