La mayoría de áreas marinas protegidas será inhabitable en 80 años [VIDEO]
La mayoría de la vida marina en las áreas marinas protegidas no podrá tolerar el calentamiento de las temperaturas oceánicas causadas por las emisiones de gases de efecto invernadero para fin de siglo.
Las áreas marinas protegidas se han establecido como un refugio para proteger la vida marina amenazada, como los osos polares, los pingüinos y los arrecifes de coral, de los efectos de la pesca y otras actividades como la extracción de minerales y petróleo.
Un nuevo estudio d ela Universidad de Carolina del Norte en Chapell Hill, que se publica en ‘Nature Climate Change’, encontró que con las continuas emisiones “normales”, las protecciones actuales no importarán, porque para el año 2100, el calentamiento y la reducción de la concentración de oxígeno harán que las Áreas Marinas Protegidas sean inhabitables para la mayoría de las especies que residen actualmente en esas áreas.
La investigación predice que bajo el Escenario Representativo de Concentración (RCP) 8.5 del Panel Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), mejor conocido como el escenario “business as usual”, las Áreas Marinas Protegidas se calentarán 2,8 grados Centígrados en 2100.
El estudio concluye que un calentamiento tan rápido y extremo devastaría las especies y los ecosistemas actualmente ubicados en las áreas marinas protegidas, lo que podría llevar a la extinción de algunos de los animales más singulares del mundo, la pérdida de biodiversidad y los cambios en las redes tróficas oceánicas.
También podría tener impactos negativos considerables en la productividad de la pesca y en los ingresos del turismo. Muchas de estas especies marinas existen como poblaciones pequeñas con baja diversidad genética que son vulnerables al cambio ambiental y es poco probable que se adapten al calentamiento del océano.
El estudio también calculó el año en que las Áreas Marinas Protegidas en diferentes ecorregiones cruzarían umbrales críticos más allá de los cuales la mayoría de las especies no podría tolerar el cambio. Para muchas áreas en los trópicos, esto sucederá tan pronto como a mediados del siglo XXI.
Se perderá gran parte de las especies de áreas protegidas
“Con el calentamiento de esta magnitud, esperamos perder muchas, si no la mayoría, especies de animales de Áreas Marinas Protegidas para el cambio de siglo –dice en un comunicado John Bruno, autor principal, ecólogo marino y profesor de Biología en la Facultad de Artes y Ciencias en UNC-Chapel Hill–.
Para evitar los peores resultados, tenemos que adoptar inmediatamente un escenario de reducción de emisiones en el que las emisiones alcancen su máximo en las próximas dos décadas y luego disminuyan significativamente, reemplazando los combustibles fósiles con fuentes de energía más limpias como la solar y la eólica”.
La investigación reveló que hay 8.236 áreas marinas protegidas en todo el mundo, aunque solo cubren aproximadamente el 4 por ciento de la superficie del océano. El calentamiento proyectado de 2,8 grados para el 2100 perturbaría fundamentalmente los ecosistemas actualmente ubicados en las Áreas Marinas Protegidas.
Se estima que las temperaturas medias de la superficie del mar dentro de las Áreas Marinas Protegidas aumentarán 0,034 grados por año. Se prevé que las áreas marinas protegidas en el Ártico y la Antártida se calentarán especialmente rápido, amenazando a numerosos mamíferos marinos como los osos polares y los pingüinos.
Las áreas marinas protegidas con mayor riesgo incluyen las del Ártico y la Antártida, en el Atlántico noroccidental, y las recientemente designadas reservas de no captura frente a las islas del norte de Galápagos, Darwin y Wolf.
“Se ha hablado mucho sobre el establecimiento de reservas marinas para ganar tiempo mientras resolvemos cómo enfrentarnos al cambio climático –concluye el investigador del estudio Rich Aronson, oceanólogo del Instituto de Tecnología de Florida, Estados Unidos–. Estamos fuera de tiempo, y el hecho es que ya sabemos qué hacer: tenemos que controlar las emisiones de gases de efecto invernadero”.
Fuente: europapress.es