La educación mexicana debe reorientar su enfoque hacia las habilidades STEM
El desarrollo de las habilidades la solución para una buena educación
Sin duda, hablar de educación es un tema que preocupa, más si nos ubicamos en la situación actual de nuestro país, que enfrenta importantes desafíos, sobre todo después de una pandemia que nos obligó a reestructurar la forma de enseñar y de aprender, y que, aun después de cuatro años, nos sigue impactando en diferentes ámbitos.
Con esta reestructuración en mente, los profesionales dedicados a transformar las escuelas vemos que el enfoque estructurado con base en la educación STEAM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas) es una solución prometedora para brindar educación de calidad.
La transformación viene a través de la educación, por ello, es necesario unir fuerzas con las escuelas para formar a los estudiantes con habilidades tecnológicas y socioemocionales que los respalden a futuro. El enfoque STEAM, además de fomentar el pensamiento crítico y la creatividad, también prepara a los alumnos para un futuro laboral donde la tecnología y la innovación serán esenciales.
Aunque existen brechas digitales, sociales, económicas y geográficas, en Pinion creemos firmemente que el enfoque STEAM no solo empodera a los estudiantes con las habilidades necesarias para ser los profesionales del mañana, sino que también ofrece una respuesta efectiva a los desafíos actuales del sistema educativo.
Aquí, algunas propuestas de solución para mejorar el panorama educativo en México:
- Implementar modelos educativos con educación tecnológica (STEAM).
- Invertir en infraestructura tecnológica.
- Dar formación continua a los docentes.
- Procurar la accesibilidad y equidad de los programas STEAM.
Para Pinion Education es muy importante contribuir al cambio del modelo educativo del país, por ello, además de tener presencia en escuelas del sector privado, trabajamos con escuelas públicas de la mano de Fundación Azteca.
Gran parte de nuestros proyectos educativos llevan como bandera la responsabilidad social, inculcando en la mente de los alumnos que el trabajo que realizan en cada proyecto debe impactar positivamente en la sociedad y se les impulsa a desarrollar proyectos tecnológicos para atender problemáticas de comunidades vulnerables.
Fuente: milenio.com