Política cyti

La ciencia del Sargazo: Julio Sheinbaum propone un nuevo enfoque para entender y mitigar su impacto en costas mexicanas

La llegada masiva del sargazo se ha vuelto un problema recurrente. Nuevos estudios proponen entenderlo como un fenómeno acoplado al océano y la atmósfera, con soluciones basadas en ciencia y gestión sostenible

En los últimos 14 años el Caribe ha tenido que aprender, demasiado rápido, a convivir con un visitante incómodo: el sargazo. Año tras año, toneladas de estas algas pardas tiñen de marrón el turquesa del mar, mientras se amontonan en las playas, alterando la biodiversidad marina, la vida costera y la experiencia turística.

El sargazo pelágico es un tipo de alga parda marina que flota libremente y que se encuentra comúnmente en las aguas cálidas del Atlántico Norte, históricamente concentrado en el Mar de los Sargazos.

Hasta 2011, el sargazo estaba concentrado en el Mar de los Sargazos: una región del océano Atlántico que se extiende entre los 70 ° y 40 ° de longitud Oeste y los 25 ° a 35 ° de latitud Norte. Es un área caracterizada por sus aguas relativamente calmas y la presencia de numerosas algas del género Sargassum, a las que debe su nombre.

Pero los últimos años, la proliferación del sargazo está marcada por la formación del Gran Cinturón de Sargazo del Atlántico, que se extiende desde la costa de África occidental hasta el Golfo de México. Una zona que puede alcanzar longitudes de hasta 8,000 kilómetros y está compuesta por estas algas pardas que se desplazan impulsadas por las corrientes oceánicas.

Y entonces, ¿por qué el cambio de locación? Varias hipótesis han relacionado la formación de este gran cinturón con un aumento en el suministro de nutrientes al Atlántico, en los últimos años, desde la atmósfera (por ejemplo, el polvo del Sahara) y el continente (desembocadura de ríos como el Amazonas, surgencia costera). Pero esto no se cumple siempre y la duda continúa.

Un artículo reciente en Nature Communications Earth & Environment, liderado por Julien Jouanno, ofrece una mirada más amplia al problema del sargazo. Y el evento Panorama Actual de las Ciencias 2025, en el Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, fue el escenario propicio para que el Dr. Julio Sheinbaum, coautor del estudio e investigador del CICESE, la presentara.

El sargazo: un viaje inesperado

La teoría relaciona los nuevos afloramientos de sargazo en el Atlántico con el transporte a larga distancia de una población semilla durante un evento intenso de la Oscilación del Atlántico Norte(NAO, por sus siglas en inglés), en 2009-2011.

La Oscilación del Atlántico Norte es un fenómeno climático que surge por la diferencia de presión atmosférica entre las zonas de baja presión cerca de Islandia y las zonas de alta presión en las Azores. Esta diferencia de presión provoca cambios en la velocidad y dirección del viento.

Durante el invierno de 2009-2010, un evento intenso de la NAO provocó una intensificación y desplazamiento al sur de vientos del oeste (contra-alisios) y cambios en las corrientes marinas. Estas condiciones arrastraron a las algas desde el Mar de los Sargazos hacia el Atlántico oriental.

En la primavera de 2010, estas algas arribaron a las costas de Gibraltar, desde donde fueron arrastradas al sur por la corriente de las Islas Canarias y luego al suroeste por la corriente Ecuatorial del Norte. Ya en el verano del 2011, las algas florecieron abundantemente, se dispersaron al mar Caribe y se formó el Gran Cinturón de Sargazo del Atlántico (GASB, siglas en inglés).

Así, se estableció la nueva «normalidad» del sargazo. El resultado de una combinación de la NAO y la influencia de sus vientos asociados en la variabilidad de las corrientes marinas, más, la existencia de condiciones favorables (nutrientes, mezcla vertical del océano, temperatura) para la reproducción y proliferación de estas algas en esta nueva región del Atlántico.

Un nuevo enfoque para el manejo

El nuevo estudio plantea que el sargazo debe analizarse como un sistema acoplado océano-atmósfera-biosfera. Y para ello, combinar observaciones satelitales, dinámica de corrientes marinas y procesos biogeoquímicos. ¿Por qué? Pues para poder entender cómo y por qué el cinturón de sargazo se expande en ciertas temporadas y regiones.

Su propuesta es migrar hacia un manejo preventivo, basado en monitoreo satelital constante, modelación oceánica y pronósticos que permitan anticipar arribos.

Durante su conferencia, Sheinbaum insistió en que la respuesta no puede seguir limitada a la limpieza reactiva de playas. Su propuesta es migrar hacia un manejo preventivo, basado en monitoreo satelital constante, modelación oceánica y pronósticos que permitan anticipar arribos.

Y un ejemplo es el proyecto FORESEA (FOREcasting seasonal Sargassum Events in the Atlantic). FORESEA usa el modelo NEMO-Sarg para hacer un pronóstico estacional e identificar las fluctuaciones del sargazo, con hasta 7 meses de anticipación.

Este proyecto se basa en aspectos físicos, biogeoquímicos y fisiológicos. Toma en cuenta el viento, las corrientes, el oleaje y condiciones favorables para su crecimiento (luz solar, temperatura, salinidad, nutrientes) y mortalidad (proceso de envejecimiento, varamiento), para realizar simulaciones de distribución del sargazo en períodos largos de tiempo.

El planteamiento incluye, además, repensar la relación con el sargazo. La idea no es solo verlo como desecho, sino explorar su potencial en bioinsumos, biocombustibles y materiales de construcción, respetando las reglas que aseguren un aprovechamiento sustentable.

Este nuevo enfoque preventivo facilitaría coordinar a gobiernos locales, científicos y sector privado en acciones conjuntas, con estrategias adaptadas a la variabilidad del sargazo en cada temporada. El mensaje es claro: el sargazo llegó para quedarse, y la cuestión es, ¿qué haremos para adaptarnos a esta nueva realidad?

Referencias

An extreme North Atlantic Oscillation event drove the pelagic Sargassum tippung point. 2025. Julien Jouanno, Sarah Berthet, Frank Muller-Karger, Oliver Aumont y Julio Sheinbaum. Communications Earth & Environment (6).

Variabilidad Interanual y el Problema del Sargazo. 8 de agosto de 2025. Julio Sheinbaum. Conferencia en el Panorama Actual de las Ciencias Atmosféricas y del Cambio Climático 2025. Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM.

Fuente: meteored.mx

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *