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Hay una víctima colateral inesperada en Google siendo declarado como monopolio: el inocente Mozilla Firefox

El fallo es definitivo: Google es un monopolio. Las reacciones son diversas: Microsoft festeja por la posibilidad de que Bing por fin tome relevancia; Apple espera en la banca porque parece que dejará de recibir mucho dinero, el que recibía de Google para que su motor de búsqueda fuera el default de Safari; y Mozilla tiene, por la misma razón, mucho de qué preocuparse.

Sucede que el fallo quiere decir que Google tiene que dejar de andar repartiendo dinero para ser el motor de búsqueda de casa de un montón de marcas. Ese es un problema grande para Apple y Microsoft, pero es un problema titánico para la organización sin fines de lucro que creó Firefox.

Fortune lo ha notado de inmediato: el navegador dejará de recibir prácticamente la totalidad de sus ingresos.

Una inyección de dinero que debe parar

El acuerdo es como cualquier otro. Google paga a Mozilla y eso hace que el motor de búsqueda de Firefox sea el de Google. Esa era ya una práctica cuestionable, pero ahora es la que le valió al gigante de internet el título de «monopolio».

Nadie lo resentirá como Mozilla porque, según las cifras citadas por Fortune, en 2021 y 2022 Fundación Mozilla tuvo un ingreso de 593 millones de dólares, de los cuales 510 millones provinieron de los pagos de búsquedas de Google.

En otras palabras, 86 de cada 100 dólares que recibe el creador de Firefox provienen de un trato que ahora está prohibido.

Firefox tiene una audiencia fiel, aunque cada vez se encoge más y más. En 2023, Firefox tenía una participación de mercado de 3.1% y en 2024 ese número pasó a 2.7%, según StatCounter. Según Worldmetrics, Firefox tiene algo así como 250 millones de usuarios activos mensuales.

El impacto total de lo de Google todavía está por verse porque, aunque ha sido declarado como monopolio, Google apelará el fallo. Por ahora, Mozilla se ha limitado a decir a Fortune que la organización defiende la competencia y que está «revisando de cerca la decisión del tribunal, considerando su posible impacto y cómo podemos influir positivamente en los próximos pasos».

Esos próximos pasos podrían incluir un acuerdo distinto Bing (aunque tendría que ser distinto dado que los acuerdos monetarios tienen pinta de ser vetados para siempre) o renovar un trato con Google, a reserva de lo que el fallo último de tribunales se los permita.

La historia está lejos de terminar, pero una cosa es clara: que Google deje de inyectar dinero a diestra y siniestra es una mala noticia para muchos otros negocios.

Fuente: xataka.com.mx