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Estas son 5 de las mujeres más poderosas de la ciencia mundial

Sus nombres son una constante en los rankings de las mujeres más influyentes del planeta.

Para estas cinco mujeres, el amor por la ciencia no se limita a la investigación y a los experimentos. Su pasión las ha llevado a posiciones de liderazgo y de toma de decisiones.

Dirigen algunas de las instituciones más importantes del ámbito científico internacional y son ejemplos claros de que la ciencia también es fruto de estrategias, colaboraciones y diálogo.

En el Día Internacional de la Mujer, BBC Mundo investigó quiénes son cinco de las mujeres más poderosas de la ciencia y encontró historias fascinantes.

Fabiola Gianotti, Italia

«La mujer con la llave de los secretos del Universo».

Así describió en 2014 el diario británico The Guardian a la física italiana Fabiola Gianotti.

En 2016, la científica se convirtió en la primera mujer en dirigir el principal centro de física de partículas del mundo, el CERN (siglas en francés de la Organización Europea para la Investigación Nuclear), ubicado en Suiza.

Desde 1994, Gianotti fue una de las físicas investigadoras de ese centro y entre 2009 y 2013 fue la portavoz del experimento Atlas en el Gran Colisionador de Hadrones.

Ese experimento fue diseñado para encontrar una partícula que explica por qué las partículas fundamentales de la naturaleza tienen masa, un aspecto clave para entender el comportamiento de la materia.

Se trata del bosón de Higgs, una partícula que había sido buscada por décadas.

El gran anuncio

Tras la pista de la elusiva partícula, Gianotti asumió el liderazgo de Atlas y tuvo a su cargo a 3.000 físicos de 38 países.

El 4 de julio de 2012, la científica fue la encargada de anunciarle al mundo que habían descubierto el bosón de Higgs.

Considerada una de las principales noticias científicas del siglo XXI, las imágenes de celebración en el CERN dieron la vuelta al mundo y Gianotti pasó a la historia.

Reina Camacho, física venezolana que empezó a trabajar en Atlas en 2009, recuerda los meses previos al hallazgo.

«Nosotros ya teníamos indicios de que la partícula existía. A medida de que el experimento recogía más información y analizaba los datos recopilados, nos sentíamos más y más seguros de su existencia. Te podrás imaginar la emoción que sentíamos», le cuenta la científica a BBC Mundo desde el CERN en Ginebra.

«Este trabajo es altamente gratificante pero es muy difícil y hay momentos de mucho estrés. Por eso lo que más me impresionó (de trabajar con Gianotti) es la calma con la que maneja los desafíos que se presentan en el trabajo del día a día. Tenía muy claras las prioridades de lo que había que hacer», indicó la física quien también trabaja en la Universidad de Chicago.

Más que una obsesión

Su figura es reconocida fuera del CERN.

«Su profundo conocimiento de muchos aspectos de Atlas así como su liderazgo inspirador son reconocidos como factores claves para que el descubrimiento (del bosón de Higgs) se hiciera tan rápido», señala el Instituto de Física británico (IOP, por sus siglas en inglés).

La revista Forbes incluyó a Gianotti en la lista de las mujeres más poderosas en 2015 (posición 83) y en 2016 (posición 84), mientras que en 2012 la revista Time la colocó en la quinta posición de su ranking de «Personaje del Año».

«Encontrar el diminuto bosón de Higgs necesitó de la máquina más grande en el arsenal de la física y la ayuda de una mujer obsesionada con la naturaleza de la realidad», escribió la publicación estadounidense.

Pero además de ser una mujer apasionada por la ciencia, la directora general del CERN es, según Camacho, «amable, con un gran espíritu de colaboración, y está muy pendiente de atender a sus estudiantes y de tener diversidad cultural y de género dentro del CERN».

«Es un orgullo tener a Fabiola como directora y eso muestra que los tiempos están cambiando, que el trabajo de las mujeres en Ciencia y Tecnología está siendo cada vez más reconocidos», señala la física, quien también integra CEVALE2VE, un grupo de investigadores de Colombia y Venezuela dedicados a las altas energías.

Christiana Figueres, Costa Rica

«Yo crecí en la finca La Lucha rodeada de cipreses, cabuya, granadillas, fresas y berros. De niña anduve a caballo diariamente con mi hermano mayor por los senderos de la finca. La naturaleza fue mi primer hogar, y sigue siendo mi hogar preferido», responde Christiana Figueres cuando BBC Mundo le pregunta cuándo se enamoró de la ciencia y de la naturaleza.

Esta antropóloga, hija del tres veces presidente de Costa Rica, José Figueres Ferrer, no es una mujer de laboratorios o de experimentos, sino de diálogo y negociaciones.

Entre 2012 y 2016, fue la Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas para el Cambio Climático (CMNUCC).

Dirigió las Conferencias de Naciones Unidas sobre Cambio Climático de Cancún 2010, Durban 2011, Varsovia 2013 y Lima 2014.

Se le considera una de las arquitectas del histórico acuerdo global sobre cambio climático al que llegaron 195 países en París el 12 de diciembre de 2015.

Fue el primer acuerdo en el que tanto las naciones desarrolladas como los países en vías de desarrollo se comprometieron a gestionar la transición hacia una economía baja en carbono y a que el aumento de la temperatura a final de este siglo se quede entre los 2 y los 1,5 grados centígrados respecto a los niveles preindustriales.

Una actitud

Sólo meses antes del acuerdo de París, The New Yorker publicó un artículo dedicado a Figueres con el título: «La mujer que podría detener el cambio climático».

Días antes de la histórica cumbre en Francia, el periódico The Guardian dijo de ella que era «la mujer con la misión de salvar el mundo del calentamiento global».

Una misión, para algunos, imposible.

Sin embargo, Figueres tiene muy claro lo que esa palabra en particular significa: «Imposible no es un hecho, es una actitud», dijo en una charla TedTalk que dictó en febrero de 2016.

«Todos me decían que encontrar una solución (para el cambio climático) era imposible, y cada uno me daba otra razón por la cual era imposible. Dichosamente yo soy testaruda y optimista. Poco a poco pudimos ir difundiendo el optimismo hasta cambiar la actitud frente al reto», le cuenta a BBC Mundo.

En 2015, la revista científica Nature, la colocó en el puesto número 1 en su lista de las personas más importantes del año. La calificó de «la guardiana del clima».

En 2016, la revista Time la incluyó en la lista «Las 100 personas más influyentes del mundo».

El año pasado, Figueres le pasó el testigo de la CMNUCC a la mexicana Patricia Espinosa. Sin embargo, su lucha contra el cambio climático continúa, ahora como directora de Mission2020, una iniciativa que busca unir diferentes fuerzas (gobiernos, instituciones y sector privado) para proteger a los más vulnerables del calentamiento global.

«Es osado predecir cómo vamos a progresar en el tema de cambio climático pero haciendo uso de mi inquebrantable optimismo, afirmo que vamos a llegar al punto de inflexión en las emisiones globales (su punto máximo) en el año 2020 y a partir de ahí las veremos descender hasta llegar a la descarbonización de la economía en el 2050».

«Lo digo no porque es un sueño esa transformación sino porque es una necesidad para poder evitar los mayores estragos de las catástrofes climáticas», indica a BBC Mundo.

Kiran Mazumdar-Shaw, India

Por su aporte a la ciencia, Kiran Mazumdar-Shaw no es ajena a las listas de líderes mundiales.

En 2010, la revista estadounidense Time la incluyó en su ranking anual conocido como «Time 100» dedicado a las personas que «más influyen en nuestro mundo». Su nombre apareció en la categoría de «héroes» por su contribución a la biotecnología.

En 2014, la revista Fortune la nombró como una de las mujeres más poderosas de la región de Asia-Pacífico y en 2015, la publicación especializada Scientific American la seleccionó como una de las visionarias de la biotecnología.

En 2016, la revista Forbes la incluyó en las listas de las mujeres más poderosas del mundo (posición 77) y de los más ricos de India (posición 65).

Mazumdar-Shaw nació en India y es la fundadora y presidenta de Biocon, una empresa pionera en el campo de la biotecnología.

«La compañía, la mayor productora de insulina en Asia, apunta a tener 10% de la participación del mercado global», indicó Forbes en 2016.

«En julio, lanzó una pluma de insulina desechable en Japón junto a Fujifilm Pharma, mientras que en agosto, fármacos biosimilares (medicamentos de origen biotecnológico) para tratar ciertos tipos de cáncer, codesarrollados con la farmacéutica Mylan, fueron aceptados por los reguladores europeos para su evaluación; las noticias sobre estos hitos impulsaron las acciones (de la empresa en la bolsa)», señala la revista.

Desde la escuela

Pero más allá de los rankings, los reconocimientos y los mercados, la historia de Mazumdar-Shaw es una historia de dedicación a la ciencia.

«Mi fascinación por la ciencia, la química y la biología, en particular, empezó desde la escuela», le cuenta la científica a BBC Mundo desde Bangalore, ciudad del sur de India.

Mazumdar-Shaw estudió Zoología en su país e hizo una maestría en procesos de destilación en la Universidad de Melbourne, en Australia.

«Regresé a India con mucho conocimiento sobre la ciencia de la fermentación, pero cuando no pude conseguir un trabajo como una mujer master en la elaboración de cerveza, empecé mi propia compañía de biotecnología».

Y lo hizo en la década de los años 70, cuando tenía 25 años.

En 2001, la revista británica The Economist la llamó «La reina de la fermentación», el rostro femenino de la biotecnología en India.

Más de 15 años después, Mazumdar-Shaw es, para los expertos, la reina de la biotecnología.

Necesidades globales

«Lo que hago hoy en día me da mucha satisfacción porque estoy desarrollando biofármacos que están respondiendo a un gran número de necesidades médicas globales que no están siendo atendidas», señala.

«Me enfoco en desarrollar insulinas y terapias con insulina que sean realmente asequibles para los diabéticos en todo el mundo. También estamos desarrollando productos (farmacéuticos) contra el cáncer para que sean asequibles. Eso está permitiendo que grandes números de pacientes en las economías en vías de desarrollo puedan acceder a esas medicinas», indica.

Y es que, explica la científica, existen fármacos absolutamente esenciales para salvar vidas pero que también son absolutamente inalcanzables para miles de pacientes en el mundo en desarrollo.

«Esa es mi misión de vida. Viniendo de India es extremadamente importante ver las necesidades globales de los pacientes porque muchas veces las grandes compañías (farmacéuticas) occidentales no incluyen a las economías en vías desarrollo (…) y sólo se concentran en pacientes con dinero y economías ricas que pueden comprar medicinas caras».

«Para mí, un medicamento de gran éxito no es el que genera US$1.000 millones (en ventas anuales), sino el que ayuda a 1.000 millones de pacientes», dice.

Una predicción de Mazumdar-Shaw en su campo: «La personalización de la medicina y del mercadeo es lo que va a cambiar la forma en que vemos la industria farmacológica y la forma en que ese sector verá al mundo».

Gwynne Shotwell, EE.UU.

«Recuerdo vívidamente, el día que aprendí lo que era ser un ingeniero. Era una chica de 15 años, una adolescente común y corriente, cuando mi mamá me arrastró a un evento de la Sociedad de Ingenieras en el Instituto de Tecnología de Illinois», dijo Gwynne Shotwell en una charla TedTalk ofrecida en 2013.

«Tuve una gran conexión con una ingeniera mecánica que había decidido dedicar su sábado a hablar con muchachas como yo. Me encantó lo que hacía. Además, tenía un traje fabuloso y unos zapatos hermosos. Dije: ‘Quiero ser ingeniera mecánica'».

Y nunca cambió de opinión. Shotwell se convirtió en ingeniera mecánica.

Su decisión dio frutos: en 2016, la publicación estadounidense Forbes la incluyó en la lista de las mujeres más poderosas del mundo y la ubicó en la posición 76. Fue la única en la categoría «Construcción e Ingeniería».

En 2015 había estado en el lugar 90.

Y es que la ingeniera, quien también estudió matemáticas aplicadas, es la presidenta y directora de operaciones de SpaceX.

Se trata de la empresa que fundó el empresario tecnológico Elon Musk con el objetivo de desarrollar tecnologías para reducir los costos del transporte espacial y permitir la colonización de Marte y los viajes turísticos a la Luna, los cuales anuncio para 2018.

Sin miedo al fracaso

Shotwell «está cargo de las operaciones del día a día», indicó la revista Forbes, «incluyendo un cronograma de 40 lanzamientos inminentes, un contrato de US$2.600 millones con la NASA para llevar astronautas a la Estación Espacial Internacional y preparar una nueva generación de naves espaciales Dargon para su primer viaje a Marte, en 2018».

El 19 de febrero, la empresa lanzó con éxito el cohete Falcon 9 que llevaba una cápsula no tripulada para la Estación Espacial Internacional, después de haber tenido que posponer la operación un día antes por problemas técnicos.

En septiembre el cohete explotó antes de despegar en Cabo Cañaveral «debido a una anomalía en la plataforma de despegue».

Y es que si alguien en SpaceX tiene claro que la ciencia se basa en múltiples intentos es Shotwell.

«Necesitamos renunciar al miedo de fracasar (…) Cuando intentas hacer algo nuevo, de innovar, de desarrollar, no puedes tenerle miedo al fracaso».

«Esa es la forma de aprender», indicó en su charla TedTalk.

Margaret Chan, China

El 21 de septiembre de 2016, la médica china Margaret Chan pronunció, en la sede de las Naciones Unidas, unas palabras que sonaban apocalípticas:

«La resistencia a los antimicrobianos es una crisis global, un tsunami a cámara lenta. La situación es mala y está empeorando».

«Tomando en cuenta las tendencias actuales, una enfermedad común como la gonorrea podría volverse intratable. Los doctores les tendrán que decir a sus pacientes: ‘Lo siento, no hay nada que pueda hacer por ti'».

Tras mencionar una serie de medidas para evitar la catástrofe, Chan pidió actuar de forma urgente y no sólo apuntó hacia las industrias farmacéuticas y de los alimentos, sino a los doctores y a los pacientes.

Y es que si hay alguien que sabe sobre este tema es Chan, la líder de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En 2006, Chan fue elegida directora general de esa institución y en 2012, fue escogida para un segundo mandato, el cual terminará en junio de 2017.

La doctora es experta en el síndrome respiratorio agudo severo (SARS) y en gripe aviar.

Lecciones

En 2015, la OMS fue duramente criticada por un panel independiente de expertos en salud por su «lenta» reacción a la peor epidemia de Ébola de la historia, la cual se desató en 2013 y dejó más de 11.000 muertos en África.

Chan prometió cambios fundamentales en la OMS para enfrentar emergencias sanitarias y un ejemplo de ello se demostró en 2016, cuando robusteció el protocolo de respuestas a emergencias del organismo.

En 2016, la revista Forbesla ubicó en la posición 38 del ranking de las mujeres más poderosas del mundo y en 2015, la había puesto en la posición 62.

Ese mismo año, Chan estuvo entre las personas más poderosas del mundo (posición 73) de la revista estadounidense.

Además de enfrentar emergencias sanitarias y la crisis de la resistencia a los antibióticos, Chan dirige la organización que también tiene la responsabilidad de erradicar enfermedades transmisibles y enfermedades que pueden ser prevenidas con vacunación.

De hecho, los expertos indican que si se dejan a un lado las críticas a la respuesta a la epidemia del Ébola, a Chan se le reconoce su compromiso con la salud de los niños y las mujeres y con el tratamiento de enfermedades crónicas.

Fuente: bbc.com