Aunque nos resulte difícil de creer en un invertebrado, los pulpos son uno de los animales más inteligentes que hay en nuestro planeta. Son capaces de utilizar herramientas y hacer una serie de actividades que te dejarían asombrado ―como controlar el color de su cuerpo de acuerdo al entorno―. Si eres de aquellos que disfrutan con las curiosidades de la naturaleza, te invito hoy a conocer cómo es el apareamiento de los pulpos.

Los pulpos y su vida sexual

En el mundo hay más pulpos de los que nos podemos imaginar. De acuerdo a la región oceánica que habiten, así será su apariencia y sus colores. Se cree que existen más de 200 especies de tan fascinante octópodo. Sus vidas son muy cortas, los que más viven lo hacen por pocos años y algunos no rebasan los seis meses.

Por esta razón, es muy difícil para los científicos conocer su vida sexual. Solo han sido testigos del apareamiento de una docena de especies de pulpos, lo que no parece mucho pero sirve al menos para hacer una representación de su proceso reproductivo.

Los pulpos viven en solitario, siempre comiendo y creciendo, hasta que un buen día se produce la maduración sexual y entonces están listos para encontrar pareja.

El cortejo de los pulpos

Los expertos no saben a ciencia cierta cómo logran los pulpos encontrarse unos a otros en la vastedad del océano, si no son animales gregarios. Todo parece indicar que los machos pasan mucho tiempo buscando a las hembras y que estas lanzan señales químicas para atraerlos. No suelen ser exigentes en sus conquistas; sin embargo, sí desarrollan interesantes cortejos a la hora de aparearse.

Los machos de los pulpos comunes muestran unas ventosas en sus tentáculos para declarar su sexo. También se ensanchan y muestran colores negros o pálidos. Algunos tipos de pulpos muestran rayas negras cuando la hembra se les aproxima.

Otros vigilan a las hembras mientras están en sus guaridas y si un macho se les acerca establecen fieras batallas con estos. Los hay muy astutos que se arrastran sin ser vistos por los machos guardianes y se aparean con las hembras en secreto.

¿Como evitan los pulpos el canibalismo sexual?

Un problema que deben enfrentar los machos de los pulpos es el canibalismo sexual, ya que las hembras son aficionadas a ello. Para evitar ser zampados, estos animales acuáticos se mantienen a una distancia prudente durante el cortejo. Otra estrategia es montar a la compañera por detrás de la manta, lo que permite escapar a tiempo en caso de que esta se torne agresiva.

El apareamiento de los pulpos

Durante el apareamiento de los pulpos, el macho deposita en la cavidad femenina su esperma usando el hectocótilo o hectocotylus ―un tercer brazo que hace las veces de órgano copulador―. En algunos tipos de pulpos esta estructura es desechable y se pierde cuando acaban de aparearse. El proceso puede tardar horas en dependencia de la especie de pulpo de que se trate.

Las hembras conservan los huevos hasta que están listas para depositarlos. Los machos mueren un poco después del apareamiento; las hembras siguen vivas para vigilar los huevos, pero una vez que se rompen, terminan por morir.

Hay una especie muy rara del Pacífico que rompe las reglas de apareamiento conocidas. Para empezar son gregarios. Hembras y machos se aparean juntando las bocas y los tentáculos. Además, las féminas no practican el canibalismo. Y, por último, pueden poner varias camadas de huevos antes de morir. Suena como la más avanzada entre los octópodos, ¿no?

En cualquier caso, el apareamiento de los pulpos es un proceso muy curioso de la naturaleza, que nos confirma una vez más la diversidad que impera en el reino animal.

Fuente: vix.com