Los científicos sorprenden al mundo con nuevas imágenes del calamar de aleta grande, moviéndose en las profundidades abisales, con tentáculos de 8 metros

El calamar gigante bigfin (en español, aleta grande”), de la familia Magnapinna, es uno de los animales más misteriosos y esquivos de las profundidades oceánicas. Con solo una veintena de avistamientos confirmados en los últimos 20 años, esta criatura sigue siendo en gran parte un enigma para los científicos. Sus largos y delgados brazos, combinados con su cuerpo relativamente pequeño y sus enormes aletas, lo hacen único entre los cefalópodos conocidos, que incluyen pulpos y calamares más comunes. A pesar de los limitados encuentros, cada avistamiento proporciona información crucial sobre esta extraña especie que habita en las profundidades más oscuras del océano.

Recientemente, un equipo de investigación ha logrado capturar imágenes asombrosas de un ejemplar de calamar de aleta grande caminando sobre el lecho marino a una profundidad de 3.300 metros en la Fosa de Tonga, en el océano Pacífico Sur. Este raro avistamiento ha renovado el interés en la biología de este singular cefalópodo, y gracias a esta filmación, los científicos han podido observar comportamientos nunca antes documentados. Las imágenes fueron tomadas por Alan Jamieson, profesor y científico de aguas profundas de la Universidad de Australia Occidental.

En la descripción del vídeo, que puedes ver a continuación, se lee: “esta criatura tiene brazos y tentáculos increíblemente largos, que pueden extenderse hasta 8 metros”.

¿Qué es el calamar Bigfin (“aleta grande”)?

El calamar de aleta grande está perfectamente adaptado a las duras condiciones de las profundidades oceánicas. Vive en la zona hadal, donde la presión es miles de veces mayor que a nivel del mar y la luz solar no penetra. Las especies que habitan a esas profundidades deben desarrollar adaptaciones extremas, y el calamar de aleta grande no es la excepción. Sus largos brazos, que cuelgan verticalmente por debajo de su cuerpo, pueden funcionar como redes, atrapando pequeñas presas que flotan en el agua. Además, sus aletas gigantes le permiten moverse de manera eficiente a pesar de las limitaciones de la presión abisal.

Al igual que otros habitantes de las profundidades, el calamar de aleta grande se alimenta principalmente de partículas que caen desde las capas superiores del océano, donde la materia orgánica es más abundante. Los científicos creen que su aspecto inusual, con apéndices largos y flexibles, le permite maximizar sus posibilidades de capturar alimento en este ambiente de recursos limitados

Avistamientos recientes

El reciente avistamiento de un ejemplar de calamar de aleta grande caminando en el lecho marino ha proporcionado imágenes sin precedentes sobre su comportamiento. Este extraño cefalópodo no suele ser visto en movimiento, y mucho menos caminando. Según los expertos, el calamar estaba probablemente intentando alimentarse, utilizando sus apéndices pegajosos para detectar y capturar pequeñas presas en el lecho marino. En el video, se puede observar cómo intenta despegar sus largos brazos del fondo, lo que refuerza la idea de que utiliza sus tentáculos de manera similar a una red.

Este tipo de avistamientos son extremadamente valiosos para la ciencia, ya que la vida en las profundidades es en gran parte desconocida. Las observaciones como estas ayudan a los investigadores a comprender mejor los ecosistemas hadales y las adaptaciones únicas de las especies que viven allí. Con cada nuevo avistamiento, se revelan más detalles sobre cómo el calamar de aleta grandey otros organismos sobreviven en uno de los entornos más extremos de la Tierra.

¿Qué diferencia hay entre aletas y tentáculos?

La diferencia entre una aleta y un tentáculo radica principalmente en sus funciones y estructura dentro del cuerpo de los animales marinos.

Las aletas son estructuras planas y delgadas, presentes en la mayoría de los animales acuáticos, como peces, ballenas y algunos cefalópodos. Su función principal es la propulsión y el equilibrio en el agua. Dependiendo de su ubicación en el cuerpo, las aletas pueden servir para impulsar al animal hacia adelante, maniobrar, frenar o mantener la estabilidad. La forma y el tamaño de las aletas varían considerablemente entre las diferentes especies, adaptándose a sus respectivos estilos de vida y hábitats.

Los tentáculos, por su parte, son apéndices largos y flexibles que se encuentran en muchos animales marinos, como los cefalópodos (calamares, pulpos). Estos apéndices suelen estar equipados con ventosas, ganchos o otras estructuras especializadas que les permiten capturar presas, manipular objetos y explorar su entorno. A diferencia de las aletas, los tentáculos no están diseñados para la locomoción, sino para interactuar con el mundo que les rodea.

A nivel estructural, las aletas y los tentáculos presentan diferencias significativas. Las aletas suelen estar soportadas por rayos óseos o cartilaginosos, mientras que los tentáculos son extensiones musculares hidrostáticas. Además, tanto las aletas como los tentáculos han evolucionado de manera independiente en diferentes grupos de animales, lo que explica su gran diversidad de formas y funciones.

Misterios por resolver

A pesar de los avances recientes, aún quedan muchas preguntas sin respuesta sobre el calamar de aleta grande. Los científicos todavía no entienden completamente su ciclo reproductivo, ni cómo interactúa con otras especies en su entorno. Dado que la mayoría de los avistamientos han sido accidentales, no se dispone de suficientes datos para hacer afirmaciones concluyentes sobre su comportamiento, alimentación o distribución.

“Esta criatura tiene brazos y tentáculos increíblemente largos, que pueden extenderse hasta 8 metros”

Otro gran misterio es por qué los brazos y tentáculos del calamar de aleta grande tienen una longitud tan extrema, superando varias veces la longitud de su propio cuerpo. Aunque los investigadores sugieren que estos apéndices podrían ser útiles para atrapar presas en el agua oscura, todavía se desconoce el mecanismo exacto que emplean para alimentarse. Para resolver estos enigmas, será necesario realizar más estudios y observaciones en el futuro

Fuente: muyinteresante.com