La asombrosa transformación de Venecia: los turistas se van y vuelven los peces a los canales
Con la desaparición de los cruceros y los visitantes por la cuarentena, la calidad del agua de las vías fluviales mejora notablemente. Los cientos de canales de la ciudad se han vaciado de lanchas y barcos turísticos.
Menos turistas, más peces
Los turistas han desaparecido de Venecia por el brote de coronavirus que mantiene a Italia en cuarentena, el país con más muertos del mundo por Covid-19, mientras que la vida silvestre está regresando a sus canales.
El agua de estas vías fluviales luce estos días cristalina, libre de contaminación y se pueden ver bancos de pequeños peces, cangrejos y algas. Una postal inédita.
Venecia se vacía
«El agua está azul y clara», cuenta Gloria Beggiato, propietaria del Metropole Hotel, a pocos metros de la plaza de San Marcos y con vistas a la laguna de Venecia. «Está tranquila como un estanque porque no hay barcas motorizadas que transporten turistas a diario. Y, por supuesto, los cruceros gigantes han desaparecido», explica al diario The Guardian.
Se extiende el confinamiento
Como en España, Italia ha establecido estrictas medidas de aislamiento de la población y solo se permite salir a la calle a los ciudadano para pasear al perro o comprar comida.
El país transalpino superó este jueves en víctimas mortales a China, con más de 3.400 muertos, y las autoridades anunciaron que el confinamiento se alargará «más allá» del 3 de abril.
Las lanchas turísticas, paradas
Los cientos de canales de la ciudad se han vaciado de taxis-lancha y de barcos turísticos. Los vaporettos, autobuses acuáticos venecianos, ahora funcionan con horario reducido. Incluso la mayoría de las góndolas están amarradas.
Se trata de una transformación notable en una ciudad que hace poco vivió protestas contra el turismo masivo bajo el lema: «No Grande Navi» («No más cruceros»).
Mejora la calidad del agua
En estas circunstancias excepcionales, la claridad del agua ha mejorado dramáticamente. Los cisnes y los cormoranes han vuelto a bucear en busca de peces que ahora sí pueden ver.
En la parada del vaporetto de Piazzale Roma, los patos incluso han hecho un nido. «Alguien ha puesto un letrero que dice: ‘No pisen los huevos de pato’ «, añade Beggiato al diario británico. «Totalmente inimaginable hace un tiempo».
Fuente: elespanol.com