El extraño gusano marino que atrapaba presas mediante las espinas de su cabeza
Se ha conseguido identificar un pequeño depredador marino que en su día deambulaba por el fondo oceánico y agarraba sus presas con 50 espinas desplegadas desde su cabeza. Llamada Capinatator praetermissus, esta primitiva criatura tenía unos 10 centímetros de largo y constituye una nueva especie dentro del grupo de animales conocidos como quetognatos, unos carnívoros marinos nadadores conocidos también como gusanos flecha.
Con sus más de 500 millones de años de antigüedad, se cree que el Capinatator fue antecesor de los quetognatos más pequeños que abundan en los océanos de hoy en día, donde suponen una gran proporción del plancton mundial y de la cadena alimentaria oceánica. Es uno de los mayores quetognatos conocidos.
Esta nueva especie debió ser un depredador eficiente y una visión aterradora para muchas de las criaturas marinas más pequeñas que vivían durante esa época, tal como argumenta Jean-Bernard Caron, de la Universidad de Toronto y del Museo Real de Ontario (ROM), ambas entidades en Canadá, así como miembro del equipo de investigación que ha hecho el descubrimiento.
Según el equipo de Caron y Derek Briggs, este de la Universidad Yale en Estados Unidos, la configuración de la cabeza del Capinatator era única. Con unas 25 espinas en cada lado de ella, el individuo típico de esta especie tenía casi el doble de la cantidad máxima de espinas existente en los quetognatos actuales. Esto le permitía capturar presas con bastante eficiencia mientras nadaba, mediante el cierre de las dos mitades de su conjunto de espinas, acercándolas entre sí.
El equipo hizo la identificación basándose en 50 especímenes del yacimiento paleontológico de Burgess Shale en la Columbia Británica.
Fuente: noticiasdelaciencia.com