El caracol volcánico, animal capaz de sobrevivir a un volcán activo
Científicos lo han comparado con un dragón por sus características únicas
Dentro de las especies de gasterópodos existe uno con ‘características de hierro’: el caracol volcánico, también llamado caracol de patas escamosas y cuyo nombre científico es Chrysomallon squamiferum.
Fue descubierto en 2001 y desde 2018 hace parte de la lista roja de especies amenazadas que emite la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza y los Recursos Naturales. Está en peligro. Se desconoce cuántos individuos hay, pero lo que sí se sabe es que vive en tres sitios de Océano Índico.
¿Qué lo hace tan poderoso?
De acuerdo con las autoridades ambientales, habita a más de 2.500 metros de profundidad, donde la luz del Sol no llega. Específicamente, está en respiraderos hidrotermales del campo Longgi al sur de Madagascar y los campos de Solitaire y Kairei, en el este de Madagascar.
Allí, en aguas profundas, permence al lado de las chimeneas de humo negro o espacios en los que hay flujo difuso, es decir, convive con temperaturas extremadamente altas que lo han preparado para lidiar con volcanes submarinos.
Para soportar las condiciones tiene un armadura única y rica en sulfuro de hierro. Incluso, investigadores de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Hong Kong analizaron algunos ejemplares y quedaron sorprendidos por su sistema.
“Una dirección posible ahora es cómo sus caparazones recubiertos de hierro resisten fuertes golpes, lo que puede proporcionarnos información sobre formas de hacer una armadura más protectora”, señalaron.
Además, otros científicos consideran que posee un ‘corazón de dragón’. Por ejemplo, el corazón del un ser humano alcanza el 1,3 por ciento de su volumen corporal total, en cambio, el corazón del caracol volcánico promedia el 4 por ciento del volumen total de su cuerpo, según describió un grupo de estudiosos de la Universidad de Oxford, Southampton y Belfast.
“La parte más excepcional del sistema circulatorio es el corazón monotocárdico extremadamente grande, que tiene un ventrículo especialmente bien desarrollado con paredes musculares muy gruesas reforzadas por haces musculares que atraviesan la luz”, señalaron en su artículo científico publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Al hermafrodita lo calificaron como “dramático animal similar a un dragón” que ha sobrevivido y contribuido a la “propagación de sus endosimbiontes bacterianos”.
Se cree que en el Océano Índico, en respiraderos hidrotermales, habría especies similares que podrían brindar elementos para la medicina.
Fuente: eltiempo.com