La avispa de mar es una especie de medusa que suele habitar las costas australianas y cuya picadura está considerada como la más letal del planeta

La avispa de mar, también llamada medusa de caja o chironex fleckeri, es una especie de medusa que pertenece a la familia Chirodropida. Este animal está considerado como uno de los más mortíferos de la tierra, tanto que numerosos estudios aseguran que su picadura es la más letal.

Principalmente habita en las aguas del norte de Australia, aunque muchas veces son desplazadas hacia las costas a causa de las corrientes marinas. No obstante, se tiene constancia de que hay ejemplares por todo el océano Índico y Pacífico. Así mismo, han sido vistas en Nueva Guinea, Vietnam y Filipinas.

Sin embargo, un dato y curiosidad a tener en cuenta sobre estas avispas de mar, es que los ejemplares adultos suelen permanecer en áreas pequeñas sin desplazarse grandes distancias. Pero, ¿qué quiere decir esto? Pues bien, los ejemplares jóvenes no tienen la misma cantidad de veneno que los adultos, siendo estos los más mortíferos. Mientras este tipo de medusas más jóvenes pueden tener el 5% de veneno, las adultas pueden poseer el 50%.

Por ello, es importante saber que, aunque las jóvenes sí se desplazan grandes distancias, las adultas tienden a permanecer juntas y en pequeñas áreas, por lo que también es más fácil ser vistas y, por tanto, evitar ser picados por ellas.

Otro de los datos más relevantes tiene que ver con su reproducción, la cual tiene lugar en los meses de octubre y mayo. Para esto, las avispas de mar prefieren arrimarse a la costa, por lo que, en muchas zonas del noroeste de Australia, como por ejemplo en Queensland, está prohibido el baño durante ese periodo.

Así es la sensación de la picadura de la avispa de mar

La picadura de este tipo de medusas es muy dolorosa. Su veneno ataca directamente al corazón, al sistema nervioso y al sistema respiratorio. Por lo que, en muy pocos casos, se sobrevive. Además, la picadura puede general necrosis en la piel y dolores muy extremos. Dichas células pueden provocar la muerte tan solo en pocos minutos debido a un paro cardiaco o a una parálisis por el dolor.

Numerosos estudios llegan a afirmar que solo una medusa adulta de este tipo podría llegar a matar a seiscientas personas con su veneno. Esta medusa posee sesenta tentáculos que pueden medir hasta tres metros de largo. En ellos es donde se encuentra el veneno a través de distintos ganchos microscópicos y células urticantes llamadas cnidocitos.

Sin embargo, ya se ha encontrado una cura para dichas picaduras. Ya en 2019, investigadores de la Universidad de Sidney desarrollaron un antídoto. No obstante, todavía se está probando, por lo que su comercialización aun no ha comenzado. Lo que sí se sabe es que dichos investigadores creen que lo más rápido para paliar tal picadura sería una aplicación tópica, es decir, cualquier fármaco que se aplique sobre la superficie del cuerpo. En este caso, en aquella parte donde se tenga la picadura.

Si se tiene curiosidad por ver a la avispa de mar en directo, debe saber que puede hacerlo en el Museo Tropical de Townsville. Allí guardar un ejemplar de este tipo de medusa en un frasco. Pues a todos les llaman la atención la longitud de sus tentáculos y su forma, pues se parecen más a un paraguas que a una cúpula o una campana, como suele ser en otros tipos de medusas.

Fuente: larazon.es