¿Cómo es el oso malayo que pensaron que era un humano disfrazado en China?
La especie de oso más pequeña del mundo puede llegar a medir 1,20 metros
Un oso malayo en un zoológico de China se volvió viral por un video en el que saluda ante las cámaras. Visitantes del Hangzhou Zoo y usuarios de redes sociales pensaron que era una persona disfrazada. Las sospechas eran tantas que la entidad responsable de la criatura tuvo que aclarar que, en efecto, era uno real. ¿Cómo es este intrigante animal?
El oso malayo, Helarctos malayanus, es la especie de oso más pequeña que existe. Este llega a medir hasta 1,2 m en posición erguida —a comparación, uno pardo, por ejemplo, que alcanza los 2,8 m— y las hembras poseen, incluso, menores tamaños que los machos. Probablemente, por este rasgo fue que pudieron confundirlo con un humano.
¿Cómo es el oso malayo?
Además de su tamaño, otra característica resaltante de este úrsido (como se denomina a la familia de los osos) es su forma alargada, tanto de sus patas como de su cuello, además de sus orejas pequeñas y cola de 3 centímetros casi imperceptible.
El color del pelaje de estas criaturas también es un rasgo llamativo: es negro, a excepción de su hocico, sus ojos y su pecho, donde tiene una mancha en forma de ‘V’. Estas partes pueden ser de tonalidades naranjas o variar entre amarillo a blanco. Este tatuaje natural lo ha llevado a ser apodado ‘oso de sol’.
Un oso que come miel
Las características de esta criatura le permiten alimentarse de frutas y miel —sí, como el famoso Winnie Pooh— en los bosques tropicales del sudeste asiático donde vive. “Su dieta está basada en nidos de abejas (miel), termitas, pequeños animales y frutas”, señala una publicación de la Revista de Ecología Tropical de la Universidad de Cambridge.
Debido a su selecta dieta, la lengua del ‘oso de sol’ es más larga que el tamaño promedio de las de los úrsidos: puede llegar a medir medio metro, conforme con el blog especializado Proyecto Tierra. Así, este órgano le ayuda a comer y extraer miel, termitas y hormigas de cualquier orificio para alimentarse.
Importancia ecológica
Los úrsidos cumplen un importante rol como dispersores de semillas en los bosques donde habitan, ya que se alimentan de frutas. Según el artículo de la Universidad de Cambridge, el oso malayo no es la excepción, aunque existe poca información al respecto.
En los bosques asiáticos, estos osos contribuyen con la siembra forestal y a dispersar semillas, principalmente de durianos, árboles de los cuales brota el durián. Este peculiar fruto, conocido como el ‘rey de las frutas’ en algunas regiones, posee fuerte aroma, pulpa suave y corteza espinosa.
Fuente: larepublica.pe