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Científicos nombran “coronavirus” a una nueva especie de insecto volador

Científicos nombran “coronavirus” a una nueva especie de insecto volador

A muchos les gustaría poder olvidar muchas de las cosas ocurridas durante la pandemia, pero los científicos son más partidarios de que debemos mantener la memoria. Quizás por ello es que han decidido bautizar a una nueva especie de insecto volador con el nombre de “coronavirus”.

Pero remitiéndonos a las razones que informaron en su documento en la revista Biodiversity Data Journal, parece que va más allá de un simple recordatorio. La pandemia de COVID-19 generó obstáculos en diferentes sectores, y sobre todo en el científico pues, pero por fortuna no impidió que los investigadores terminaran la descripción de la nueva especie.

Potamophylax coronavirus, una nueva especie de insecto volador

El equipo de la Universidad de Prishtina descubrió a Potamophylax coronavirus en un arroyo en el Parque Nacional Bjeshkët e Nemuna en Kosovo hace algunos años. A pesar de ello, no fue sino hasta la actual pandemia que sus integrantes lograron describir a detalle tanto al macho como a la hembra, aunque de esta solo consiguieran un espécimen.

P. coronavirus es un insecto volador de color marrón y con alas alargadas, pero que pese a ello ha mostrado una actividad de vuelo muy limitada. Es bastante similar a sus congéneres Potamophylax juliani y Potamophylax winneguthi, aunque es notoriamente más pequeño.

Los investigadores lograron observarlo a finales de septiembre, octubre, noviembre y principios de diciembre; de ahí que indiquen que la especie tiene un período de vuelo otoñal. Además, durante el recorrido en el parque de Kosovo lo encontraron en dos localidades dentro de un perímetro de 3 kilómetros, en áreas abiertas de manantiales, muy por encima de la línea de los árboles.

¿Por qué llamar a una especie de insecto “coronavirus”?

Es importante aclarar que los insectos voladores y los virus son grupos de organismos totalmente diferentes, aunque algunos insectos puedan transmitirlos a otras especies. En este caso, la idea de entremezclarlos y otorgarle el tan temerario nombre de coronavirus al nuevo insecto surgió de dos situaciones surgidas durante el estudio de la especie.

Una de ellas es, como mencionamos al principio, que el artículo descriptivo se redactó en el transcurso del brote de COVID-19. La segunda es una metáfora que plantea que hay otra pandemia silenciosa que ocurre en organismos de agua dulce en los ríos de Kosovo.

Una especie vulnerable a la contaminación y degradación de hábitats

Esta pandemia parece ser resultado de la contaminación y la degradación de los hábitats de agua dulce, así como del aumento de la actividad de las centrales hidroeléctricas mal administradas. P. coronavirus es particularmente sensible a las actividades en curso en el río Lumbardhi i Deçanit, por lo que estas actividades podrían marcar el inicio de su extinción.

“Esta investigación destaca las montañas Bjeshkët e Nemuna como un área importante, que alberga especies raras de moscas caddis, que están, al mismo tiempo, en grave peligro de extinción por las actividades en curso que causan la degradación de los hábitats de agua dulce”.

Con la distribución de las vacunas y las medidas de contención, es probable que el SARS-CoV-2 sea controlado más temprano que tarde. Pero los científicos mantienen sus expectativas de seguir estudiando la “versión insecto” del coronavirus en el futuro.

Fuente: tekcrispy.com

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