La educación superior ha demostrado ser el factor más importante de desarrollo científico, tecnológico y cultural, coinciden académicos
Participaron Luciano Concheiro, de la Secretaría de Educación Pública; Silvia Guiorguli, de El Colegio de México; Arturo Reyes Sandoval, del Instituto Politécnico Nacional; y los colegiados Adolfo Martínez Palomo, del Cinvestav; y José Sarukhán de la UNAM
Como parte del ciclo La Enseñanza: Retos para el siglo XXI, que organiza El Colegio Nacional bajo la coordinación del historiador y miembro de esta institución, Javier Garciadiego, la mañana de este sábado 27 de febrero, se llevó a cabo una mesa redonda, transmitida en vivo, para reflexionar sobre la situación que presentan en la actualidad las instituciones de educación superior del país, sus antecedentes, retos y perspectivas.
En la mesa redonda participaron el Subsecretario de Educación Pública del gobierno federal, doctor Luciano Concheiro; la Presidenta de El Colegio de México, doctora Silvia Guiorguli; el Director General del Instituto Politécnico Nacional, doctor Arturo Reyes Sandoval; y los investigadores, miembros de El Colegio Nacional, doctor Adolfo Martínez Palomo, académico del CINVESTAV; y el doctor José Sarukhán, ex rector de la UNAM.
En la presentación de bienvenida el doctor Garciadiego informó que la reflexión sobre diversos temas educativos ocupará un lugar central en la agenda de actividades de 2021 de El Colegio Nacional, en el marco de las celebraciones por el centenario de la creación de la Secretaria de Educación Pública.
En una primera ronda de participaciones los invitados hicieron una presentación en extenso de los antecedentes, características y situación actual de las cinco instituciones de educación superior mexicanas convocadas para esta sesión, todas ellas de gran dimensión e impacto para el desarrollo de la ciencia y la educación del país: la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); el Instituto Politécnico Nacional (IPN), El Colegio de México (COLMEX), el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN (Cinvestav), y la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El doctor Sarukhán presentó los diversos indicadores que convierten a la UNAM en la institución de educación pública más grande del país, con sus más de 350 mil alumnos en bachillerato, licenciatura y posgrado, más de 50 mil académicos, presencia nacional e internacional; y su gran aporte histórico como plataforma de movilidad social, para lo cual recordó que en la actualidad uno de cada tres alumnos representa la primera generación en sus familias que logran acceder a los estudios universitarios.
Los valores que animan a la UNAM desde la conquista de su autonomía en 1929: Libertad y Autonomía, Gobierno para la Academia, y Calidad y pertinencia social de sus resultados, siguen estando vigentes en sus diversas aportaciones al desarrollo del país, afirmó.
El Director General del IPN mencionó que a 85 años de su creación esta institución tiene un verdadero carácter nacional con presencia en 24 entidades del país, 211 mil estudiantes, 16 mil docentes y 9 mil trabajadores administrativos.
“El IPN es la segunda fuerza científica del país con la mayoría de sus investigadores integrantes del Sistema Nacional de Investigadores (SIN), del CONACYT. Tan sólo en 2020, a pesar de la pandemia, sus investigadores registraron 35 patentes nacionales, como una muestra del gran aporte del IPN al avance científico y tecnológico del país”, indicó el doctor Reyes Sandoval.
Comentó además que el establecimiento de centros de vinculación al desarrollo regional, y la creación de redes nacional de investigación le permite al IPN orientar sus esfuerzos para detectar ventajas competitivas y oportunidades de desarrollo en cada estado del país.
La presidenta del COLMEX, Silvia Giorguli, mencionó que desde su fundación en 1938 como la Casa de España -que albergó durante la presidencia de Lázaro Cárdenas al exilio español- esta institución a lo largo de ocho décadas se consolidó como un centro de excelencia académica del más alto nivel orientado a contribuir a la solución de los problemas nacionales, regionales y de orden mundial.
Los 168 académicos que forman parte de la institución en la actualidad, los más de 4 mil egresados a lo largo de su historia, su biblioteca con más de 700 mil volúmenes, y los nuevos programas multidisciplinarios que impulsa orientados al estudio de las desiguales en México, los estudios de género, y sobre la discriminación étnico-racial en el país, confirman la fortaleza y prestigio del COLMEX en la actualidad.
El doctor Martínez Palomo, comentó que el Cinvestav del IPN, creado en 1961, está conformado en la actualidad por 599 investigadores -93 por ciento integrantes del SNI-, cerca de tres mil alumnos de posgrado, y que desde su fundación ha titulado a más de 10 mil estudiantes de maestría y 4 mil de doctorado, quienes en la actualidad contribuyen con su trabajo científico en la totalidad del territorio nacional.
Mencionó el papel determinante que el Cinvestav ha tenido durante la pandemia del Covid-10, en la generación de pruebas diagnósticas y equipos de protección, entre otras iniciativas científicas, y recordó que el haber asegurado estudiantes de tiempo completo desde su fundación, con acceso totalmente gratuito a su educación, y bajo una irrestricta libertad académica, son algunos de los aspectos que hacen del Cinvestav “una institución nacional líder en la formación de recursos humanos de alto nivel y en la generación de conocimiento científico y tecnológico de frontera”.
El subsecretario Luciano Concheiro reflexionó sobre la creación de la UAM en 1974, la cual se dio como respuesta desde el Estado a los movimientos estudiantiles y populares de 1968 y 1971, y ante la necesidad de ampliar el acceso de la población juvenil a la educación universitaria.
Destacó que desde su creación la UAM se convirtió en un proyecto académico transformador, con un fuerte compromiso social, y que apostó por la innovación pedagógica a partir de la conformación de áreas integradas de conocimiento interdisciplinario, bajo un sistema modular y divisional que estuvo a la vanguardia del diseño de modelos universitarios en el último cuarto del siglo XX.
Recordó asimismo la importancia que en los primeros años de la UAM tuvieron las aportaciones del exilio sudamericano que enriqueció y diversificó su planta docente y de investigadores, y que en la actualidad la UAM tiene, como otras instituciones de educación superior del país, un carácter eminentemente nacional.
En una segunda ronda de intervenciones los participantes esbozaron algunos de los retos actuales de la educación superior en el país. Tal es el caso de la necesidad de ampliar y fortalecer las prácticas interdisciplinarias en la formación universitaria, y de crear una nueva, más ambiciosa y compleja currícula de estudios interdisciplinarios como parte de las transformaciones que experimenta la generación de conocimientos en el siglo XXI, como lo expuso el doctor José Sarukhán.
Es el caso también de buscar una nueva eficiencia en la movilidad escolar frente a los retos sociales y tecnológicos de la educación a distancia, como lo advirtió el director del IPN, Reyes Sandoval, quien advirtió que debemos recuperar la sociabilidad del fenómeno educativo, y revertir las desventajas en materia de acceso a las tecnologías que están provocando graves desequilibrios entre la población universitaria del país.
La presidenta del COLMEX mencionó entre otros retos actuales de la educación superior en México se encuentra el de ofrecer alternativas y soluciones a los graves problemas de desigualdad que persisten en el país, al igual que en materia de violencia e inequidad de género, y que será necesario también establecer nuevos programas para conocer y dimensionar los efectos de la pandemia y la educación en línea en las nuevas generaciones de estudiantes.
El doctor Martínez Palomo mencionó que es urgente revisar los problemas actuales que enfrenta el Cinvestav en materia de reducción presupuestaria, asfixia administrativa, disminución de los salarios y cancelación de los seguros médicos, entre otros aspectos que obligan a revisar la situación actual de cara al reconocimiento de esta institución como protagonista histórica del desarrollo científico nacional.
El subsecretario Concheiro coincidió en que el de la desigualdad es uno de los grandes retos que enfrenta el país, se refirió a este problema como “el otro virus que enfrentamos”, y señaló que se requiere una política educativa de Estado que responda a la creciente demanda educativa para el sector superior, que pasó de 28 mil alumnos en 1960, a 4.7 millones de universitarios en la actualidad.
“Debemos recuperar el tema de la responsabilidad social de las universidades, e integrar un verdadero sistema nacional de universidades que apuesten por la interculturalidad, para lo cual resulta de gran relevancia la aprobación de la Ley General de Educación Superior que se elabora actualmente”, señaló.
Fuente: El Colegio Nacional