Rivian, la desconocida ‘start-up’ que podría destronar a Tesla
El gran espectáculo de la presentación de Cybertruck de Tesla, con sus ángulos problemáticos y sus ventanas rotas, se recordará como la mayor noticia en el área de camionetas eléctricas de 2019. Pero una start-up rival posiblemente tuvo un 2019 más monumental, y eso que aún no ha presentado ni un solo vehículo. Sin embargo, sus avances podrían tener una mayor influencia en la creación de un mercado para estos vehículos.
Hablamos de Rivian, que recientemente anunció que había recaudado unos 1.150 millones de euros en su cuarta ronda de financiación del año. Esto eleva su total de 2019 hasta los casi 2.600 millones de euros. Además, la empresa ha alcanzado acuerdos para producir 100.000 camionetas de reparto para Amazon y proporcionar tecnología que Ford usará para desarrollar su vehículo eléctrico de próxima generación. Ambas compañías figuran entre los principales inversores de Rivian.
Rivian lleva una década desarrollando vehículos sin hacer mucho ruido, pero captó la atención de la industria a finales de 2018, cuando presentó un par de llamativas camionetas eléctricas y de alta gama. La R1T y la R1S SUV prometieron ser versiones totalmente eléctricas de lo que más les gusta a los consumidores estadounidenses: los vehículos grandes y resistentes. Están diseñadas para resistir condiciones fuera de la carretera y supuestamente tendrán una autonomía de casi 645 kilómetros gracias a una batería adicional. Las primeras entregas están programadas para finales de 2020.
Pero las ambiciones de Rivian no acaban aquí. Los vehículos de la compañía, así como los que venderá a Amazon y Ford, se construirán sobre el llamado chasis «skateboard» de la empresa. La batería, la suspensión, el sistema de frenos y los componentes mecánicos se colocan por debajo de la altura de las ruedas, lo que baja el centro de gravedad del vehículo. Eso mejora la conducción y aumenta el espacio de almacenamiento, afirma la compañía.
Y lo que es más importante aún, se trata de un sistema flexible, lo que permite a las compañías construir sobre él y facilita el camino para que los fabricantes de coches actuales desarrollen sus propias líneas de vehículos eléctricos. El acuerdo con Ford será una prueba de eso. «Podemos aprovechar nuestra tecnología de skateboard en su totalidad o venderla por partes, como la batería», dijo a Forbes el fundador y director ejecutivo de Rivian, RJ Scaringe.
Al proporcionar dicha tecnología de plataforma, Rivian se posiciona como una especie de Microsoft para la Apple de Tesla, con la esperanza de lograr captar una mayor cuota de mercado. Si su apuesta funciona, Rivian podría hacer mucho más para acelerar el cambio a vehículos eléctricos de bajas emisiones que cualquier compañía centrada en producir sus propios coches y camiones, ya sea «a prueba de balas» o no.
Por otra parte, hay cientos de miles de Teslas en las carreteras, mientras que Rivian ni siquiera ha comenzado a ofrecer pruebas de conducción, por lo que todo depende bastante del rendimiento para llegar a la altura de las expectativas.
Fuente: technologyreview.es