Innovación

Desarrollaron una pastilla experimental contra el asma

Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Leicester ha desarrollado una pastilla experimental para tratar el asma severo. Durante la investigación probaron este nuevo medicamento en 60 voluntarios que empleaban inhaladores de esteroides y tras el tratamiento experimentaron menos inflamación en sus vías respiratorias.

Ahora, un estudio llevado a cabo por la Universidad de Leicester (Inglaterra) y publicado en la revista The Lancet Respiratory Medicine abre la ventana de la esperanza para los adultos con asma grave: una pastilla experimental llamada Fevipiprant para tratar el asma severo.

Y es que para la mayoría de las personas, los tratamientos con inhaladores o similares pueden ayudarles a mantener esta enfermedad del sistema respiratorio bajo control pero, para otras, con síntomas mucho más persistentes, los tratamientos no son tan halagüeños.

Los investigadores contaron con la participación de 60 pacientes con asma severa que empleaban inhaladores de esteroides y acudían regularmente a sus visitas con especialistas en la material. A la mitad del grupo, 30 voluntarios, se les administró la nueva pastilla durante tres meses junto a su medicación habitual; la otra mitad de los participantes continuó tomando su medicación normal además de un placebo, como grupo de control en el experimento.

La cantidad de medicamento administrada fue de 225 miligramos vía oral dos veces al día durante doce semanas.

Los pacientes que recibieron el fármaco Fevipiprant (entre febrero de 2012 y enero de 2013), experimentaron menos inflamación en sus vías respiratorias. Otros pacientes con asma no controlado sintieron que sus síntomas también mejoraron.

Así, los resultados revelaron que el porcentaje de presencia de eosinófilos -asociado con la inflamación de las vías respiratorias- en los pacientes que sí recibieron el fármaco cambió del 5.4 por ciento al 1.1 por ciento. En los que fueron tratados con placebo, tan solo se redujo del 4.6 por ciento al 3.9 por ciento.

Tras dejar el fármaco, los síntomas volvieron y la mejoría cesó.

Los científicos creen que «la posibilidad de tomar una píldora en lugar de utilizar un inhalador será muy bienvenida, especialmente para las personas que desarrollan la enfermedad en la edad adulta, ya que algunos encuentran dificultades para utilizar un inhalador».

«Se necesita más investigación y estamos muy lejos de que una píldora para el asma esté disponible en el mostrador de la farmacia, pero es un desarrollo emocionante», aclara Samantha Walker, coautora del trabajo.

Como toda investigación en proceso, los resultados han de verse con optimismo pero con cautela.

«Los datos apoyan firmemente la realización de más estudios para ver si Fevipiprant también puede reducir la frecuencia de los ataques de asma, evitar los efectos secundarios de los esteroides y reducir los costes sociales en el manejo de estos pacientes gravemente enfermos», concluye la experta.

Fuente: cienciaxplora.com