Una tribu india construye puentes vivientes que tardan 30 años en llegar a la otra orilla, pero viven 500 años [VIDEO]
La paciencia es una virtud poco común en estos tiempos cada vez más acelerados que vivimos. La tribu de los Khasi, en la India, tiene mucha paciencia… y la recompensa dura medio milenio.
Tenemos mucho que aprender de los Khasi y los Jaintia, tribus que viven en la región de Meghalaya, en la India. Muchas sociedades modernas solo se preocupan de sí mismas, de su generación, sin pensar a medio o largo plazo. Y por eso nos pillan por sorpresa cosas como el coronavirus o el cambio climático.
Los Khasi trabajan para las próximas generaciones. Muchos artesanos dedican toda su vida a construir puentes vivientes que ellos no disfrutarán. Pero lo harás las futuras generaciones durante 500 años.
Estos puentes vivientes están construidos con las raíces vivas del Ficus Elastica, un árbol originario de la India pero muy común en todo el mundo como planta ornamental. Se puede encontrar en cualquier floristería, e incluso en Amazon. Durante mucho tiempo fue el árbol del que se extraía el caucho y la goma elástica, pero fue sustituido por otra especie más productora.
Estos puentes sobre ríos tardan entre 15 y 30 años en llegar a la otra orilla, pero como están vivos, aguantan más de 500 años.
Llegan a medir entre 10 y 50 metros, y tienen una anchura de varios metros. Son capaces de aguantar el peso de hasta 40 personas.
Existen varios métodos de construcción. El más común consiste en cortar las cortezas del árbol y usarlas como tuberías en donde se introducen las raíces jóvenes del ficus, que son muy elásticas y resistentes. Se puede ver en este vídeo:
Las raíces van creciendo en el interior de la corteza, que son las que dan la forma al puente.
Pero es un trabajo muy sacrificado que exige dedicación continua durante años, ya que dichas raíces tienen mucha fuerza y crecen rápido en climas tropicales, así que terminan rompiendo las cortezas o crecen ramificaciones que hay que redirigir.
En un plazo de entre 15 y 30 años, según la longitud que requiera el puente, ya está operativo. Algunos son tan grandes que incluso se puede construir una pequeña calzada de piedra, como se ve en la foto de apertura.
Es el sistema de construcción de puentes más lento del mundo, pero es el único posible en regiones con mucha selva en donde no existen grandes piedras ni maquinaria para construir.
A cambio estos Ficus viven más de 500 años, proporcionando un paso estable sobre el río a numerosas generaciones de Khasi.
Fuente: computerhoy.com