«Una de cada 20 plantas con flores son transgénicas de forma natural»: estudio científico sobre OGM
Efectivamente. «Una de cada 20 plantas con flores es transgénica de forma natural», estás son las conclusiones de un estudio genético que ha analizado genomas de más de medio millar de plantas. Eso incluye al plátano, los cacahuetes, el lúpulo, los arándanos o el té.
Todas ellas contienen segmentos de ADN adquiridos evolutivamente gracias a una infección de un Agrobacterium. Justo la misma bacteria que nosotros solemos usar para crear transgénicos en el laboratorio. ¿Qué significa esto para el mundo de los organismos genéticamente modificados?
Qué hace un Agrobacterum como tú en un laboratorio como este
El Agrobacterium es un género de bacerias gram negativas que tiene una capacidad natural para transferir ADN a las células vegetales. Eso tiene algunas cosas negativas (estas bacterias suelen causar tumores en plantas), pero también tiene cosas positivas (son una de las grandes herramientas biotecnológicas para desarrollar transgénicos).
Y es que el Agrobacterium tumefaciens, por hablar de la especie más conocida, es una bestia parda. En el 77, Chilton se encontró por primera vez con ADN de estas bacterias mientras analizaba un tumor. En los siguientes años, Jozef Schell, Marc Van Montagu y el resto de su equipo describieron el mecanismo que hacía eso posible. Y, para 1983, el grupo de investigación de Chilton ya era capaz de usar ese mecanismo sin riesgo de provocar problemas en las células.
Fue en ese momento cuando empezamos a utilizar esa capacidad para insertar trozos de ADN en nuestro beneficio. Durante décadas, hemos usado estas bacterias para desarrollar los transgénicos. Sin embargo, pensábamos que éramos muy originales. Exceptuando el caso de los tumores, se creía que las Agrobacterium rara vez hacían de transportista genético.
Los transgénicos naturales
Sin embargo, en 2015, un grupo de investigadores descubrieron que las batatas eran transgénicos naturales. Es decir, tenían fragmentos de ADN funcional que, evolutivamente, habían entrado en ellas gracias a una infección de Agrobacterium. Esto era interesante, claro, pero ¿cómo de extendidos estaban estos ‘transgénicos naturales’?
Ahora, un equipo de investigadores ha seleccionado una muestra representativa de 356 especies de plantas con flores y analizaron sus genomas. Según publican en Plantt Molecular Biology, entre ellas encontraron 15 especies transgénicas naturales. Puede parecer poco, pero 1 de cada 20 significa que están mucho más extendidos de lo que pensábamos.
Pero esta noticia es interesante más allá de la curiosidad concreta. La existencia de transgénicos naturales puede llevar a un revival de estas técnicas en Europa donde la investigación ha sufrido un parón importante, pero la legislación deja claro que las modificaciones genéticas naturales no caen dentro de las restricciones. ¿Estamos ante una nueva era de oro de este tipo de plantas?
Fuente: xataka.com