Ciencia

Piel de gallina y pezones erectos están en manos de neuronas especializadas

El cuerpo es poco discreto a la hora de ocultar sensaciones como el frío, el miedo y el deseo sexual. Un nuevo estudio, publicado hoy en la revista Nature Neuroscience, explica el mecanismo celular detrás de reacciones tan humanas como la llamada piel de gallina (piloerección) y la rigidez de los pezones.

Este trabajo, liderado por expertos del Instituto Karolinska (Suecia), echa para atrás la teoría de que el sistema nervioso simpático, que es involuntario y se encuentra más o menos fuera de nuestro control consciente, reacciona de la misma forma independientemente del estímulo físico o emocional que lo pone en marcha.

Ahora, los científicos han mostrado que dicho sistema comprende diferentes tipos de neuronas que regulan funciones fisiológicas específicas, como el control muscular eréctil.

El objetivo del sistema nervioso simpático es mantener un equilibrio de las funciones corporales y regular las actividades diarias, como la locomoción, la ingestión, la temperatura corporal y la respuesta de lucha o huida.

«El sistema nervioso simpático se compone de muchos tipos de neuronas que regulan funciones específicas en el cuerpo», explica Alessandro Furlan, autor e investigador en la institución sueca. «Encontramos que la piel de gallina y la excitación de los pezones están causados por neuronas especializadas mediante el control de los músculos de erección en estos tejidos».

Distintas neuronas, distintas funciones

En el presente estudio, los expertos llevaron a cabo un análisis a gran escala de las células nerviosas simpáticas y demostraron que hay muchos tipos de estas neuronas, que se asocian con funciones particulares.

Los científicos consiguieron incluso mostrar cómo las células nerviosas simpáticas son heterogéneas y están enfocadas en diferentes funciones y cómo los órganos que estas células controlan están involucrados en dicha especialización.

«Ahora que tenemos la información celular y molecular, el futuro promete ser muy emocionante cuando este conocimiento se pueda utilizar para comprender cómo se forma dicho sistema durante la gestación y cómo los diferentes tipos de neuronas controlan las distintas funciones del cuerpo», concluye Patrik Ernfors, autor principal del trabajo.

Fuente: SINC