Nuevo hallazgo en Marte: tuvo agua en abundancia, y hasta hace menos tiempo de lo esperado
Nuevas imágenes capturadas por el rover Curiosity han dado a los científicos una nueva visión del pasado de Marte
Aunque hoy en día pueda parecer difícil imaginarlo, Marte fue muy diferente a como actualmente es. En realidad, hace billones de años, el planeta rojo contenía mucha agua, y lugares como su cráter Gale presentaban enormes lagos. Después, su clima fue cambiando, hasta convertirse en el inhóspito desierto formado por arena y rocas que todo el mundo conoce.
Ahora, el rover Curiosity de la NASA ha revelado nueva información sobre el pasado de Marte. Al parecer, sus hallazgos demuestran que algunas de las teorías de los científicos acerca del planeta no son correctas: podría haber tenido más agua de la que se pensaba, y hasta tiempos más recientes. Un descubrimiento que obligaría a cambiar muchas ideas previas.
El misterio del agua en Marte
Hace ya bastante tiempo que la NASA puso su lupa sobre Marte, intentando descubrir todos los misterios que el vecino más cercano a la Tierra esconde sobre su superficie (o bajo la misma). Misterios que, tal y como van descubriendo los científicos, están ahí, solo necesitan ser observados. El último de ellos, relacionado con una de las claves del planeta: el agua.
Pero lo primero es situarse, geográficamente hablando. Las nuevas observaciones se han llevado a cabo en el llamado cráter Gale. Es decir, en uno de los lugares más interesantes de Marte, cerca de su ecuador, en el hemisferio sur marciano, y que cuenta con un diámetro de aproximadamente 154 kilómetros. Allí aterrizó el rover Curiosity de la NASA en 2012.
Lo más notable del Cráter Gale es que contiene una montaña central masiva llamada Monte Sharp (también conocido en ocasiones como Aeolis Mons), que se eleva a una altura superior a los 5.5 kilómetros desde el fondo del cráter. Además, sus capas sugieren la presencia de procesos geológicos y climáticos complejos a lo largo de la historia del planeta.
Esta vez, el Curiosity ha utilizado su cámara principal para realizar imágenes que, según los expertos, revelan un hecho asombroso: el cráter contuvo agua hasta mucho tiempo después de que supuestamente el planeta se secara y se volviese tan inhóspito como se presenta en estos momentos.
En busca de pistas
Así lo ha comunicado el doctor Steven Banham, del Departamento de Ingeniería y Ciencias de la Tierra del Imperial College de Londres. “La piedra arenisca muestra que el agua probablemente abundaba más recientemente y durante más tiempo de lo que se pensaba anteriormente, pero ¿mediante qué proceso el agua dejó estas pistas?”, ha dicho.
Los científicos no muestran dudas, por lo tanto, de una abundante presencia de agua, pero sí sobre en qué forma se manifestó la misma. Según ellos, podría haber sido líquido presurizado, congelada (y descongelada después), o incluso salada, y sujeta a grandes cambios de temperatura. Lo que está claro es que esos sedimentos no fueron movidos por el viento.
¿Esconderá el cráter Gale de Marte otros misterios, capaces de revelar más información sobre el pasado y el desarrollo marciano? Los astrónomos confían en ello. Al fin y al cabo, el Curiosity no se posó allí por casualidad, ¿verdad?
Fuente: computerhoy.com