NASA: Quedan al menos 50 asteroides cercanos a la Tierra sin localizar
En 2018 los astrónomos calculaban haber identificado el 91% de los objetos cercanos a la Tierra de más de un kilómetro de diámetro
Existen al menos 50 objetos cercanos a la Tierra con un diámetro mayor a un kilómetro que aún no han sido detectados por los instrumentos más sofisticados de la NASA. La última estimación de la agencia espacial puntualiza la importancia de observar con atención para prevenir una catástrofe mundial.
Hay casi 32,500 asteroides cercanos a la Tierra que varían en tamaño. La mayoría de ellos no representan un peligro para la vida en la Tierra debido a su masa insuficiente, pero aquellos que superan los 10 metros de diámetro tienen el potencial de causar serios daños. La energía liberada por el impacto de estos meteoritos es equivalente a bombas atómicas.
El bólido de Cheliábinsk, Rusia, explotó en el cielo en 2013 y envió a decenas de personas al hospital debido a las consecuencias de la onda expansiva. Medía apenas 17 metros de alto por 15 metros de ancho. El meteorito Chicxulub, principal sospechoso en la extinción de los dinosaurios, pudo haber medido 10 kilómetros de diámetro.
Por acuerdo internacional, la localización de asteroides con un diámetro mayor a un kilómetro es una prioridad. Afortunadamente, estos cuerpos son fáciles de localizar y representan un porcentaje pequeño de los objetos en el espacio. Además, la probabilidad de colisión con la Tierra disminuye a medida que su tamaño aumenta.
Para el año 2018, los astrónomos calculaban que habían identificado el 91% de los objetos cercanos a la Tierra de más de un kilómetro. Según la aproximación más reciente de la NASA, solo quedan 50 asteroides de ese tamaño por descubrir. Los satélites y telescopios han detectado hasta ahora 853 objetos espaciales.
Existen planes de mitigación y contención en caso e un probable impacto de un asteroide. La detección oportuna es fundamental para determinar si el asteroide caerá cerca de un poblado, montaña o mar. Si se verifica que puede caer cerca de una ciudad o pueblo, las autoridades pueden iniciar una evacuación planificada. Si el asteroide supone un impacto directo con una liberación de energía similar a una o varias bombas nucleares, se puede proceder a un plan más sofisticado.
Las agencias espaciales están probando sistemas de desviación de asteroides que resultan más eficaces que la explosión de las rocas gigantes espaciales. La ESA tiene el proyecto HERA, la NASA tiene el proyecto DART y China está construyendo un sistema similar de cohetes cinéticos.
Las agencias espaciales están uniendo esfuerzos para crear satélites que permitan un mejor mapeado del sistema solar, con el fin de evitar que los asteroides potencialmente peligrosos sean identificados cuando sea demasiado tarde. El NEO Surveyor, por ejemplo, es la futura sonda que lanzará la NASA a la órbita de la Tierra y está específicamente diseñada para detectar y monitorear asteroides de más de 140 metros de diámetro, a semanas de que lleguen a la Tierra
Fuente: es.wired.com