De acuerdo con el famoso físico, el proyecto Breakthrough Starshot sería la única posibilidad de escapar de nuestro planeta

En 2017, en una conferencia realizada en Pekín, China, Stephen Hawking afirmó que el aumento de la población y la demanda de energía convertirán al mundo en una bola de fuego abrasadora en 2600. Afortunadamente, a este escenario apocalíptico le sumó una dosis de esperanza: nuestra única posibilidad es escapar de nuestro planeta, es un proyecto, conocido como Breakthrough Starshot.

La iniciativa, de la cual formaba parte el propio Hawking junto a Mark Zuckerberg y Yuri Milner (físico y billonario), se basa en la construcción de pequeñas naves espaciales impulsadas por rayos de luz pudieran llegar a Alpha Centauri.

“La historia de la humanidad es una historia de grandes saltos: desde África, a través de los océanos, a los cielos y al espacio – explican en su página web -. Desde el viaje a la luna del Apolo 11, hemos estado enviando nuestras máquinas por delante de nosotros, a planetas, cometas e incluso al espacio interestelar”.

Pero con la tecnología actual de propulsión de cohetes, se necesitarían decenas o cientos de milenios para llegar a nuestro sistema estelar vecino, Alpha Centauri. Las estrellas, al parecer, han establecido límites estrictos al destino humano. Al menos hasta ahora.

En la última década y media, los avances tecnológicos han abierto la posibilidad de realizar viajes espaciales impulsados ​​por luz a una fracción significativa de la velocidad de la luz. Esto implica un proyector de luz terrestre que impulsa nanonaves ultraligeras (sondas espaciales en miniatura unidas a “velas de luz”) a velocidades de hasta 160 millones de kilómetros por hora. Un sistema de este tipo permitiría una misión de sobrevuelo para llegar a Alpha Centauri en poco más de 20 años desde el lanzamiento, transmitiendo imágenes de su planeta recientemente descubierto, Proxima b, y de cualquier otro planeta que pueda encontrarse en el sistema, así como recogiendo otros datos científicos como el análisis de los campos magnéticos.

“Breakthrough Starshot tiene como objetivo demostrar la prueba de concepto de las nanonaves ultrarrápidas impulsadas por luz y sentar las bases para un primer lanzamiento a Alpha Centauri en la próxima generación – añaden los responsables -. En el camino, el proyecto podría generar importantes beneficios complementarios para la astronomía, incluida la exploración del sistema solar y la detección de asteroides que cruzan la Tierra”.

Obviamente, quedan por resolver una serie de difíciles desafíos de ingeniería antes de que estas misiones puedan convertirse en realidad. No solo se trata de llegar allí, sino de equipar las naves con tecnología de análisis, energía suficiente para obtener esa información y capacidad para transmitirla. Y aun así, si esto se consigue, se tardarían décadas hasta que la información regrese a la Tierra… si tenemos suerte y todavía estamos aquí.

Fuente: larazon.es