Científicos de la Universidad de California en San Francisco están aprendiendo cómo las células inmunitarias eliminan de forma natural del organismo las células caducas o senescentes que contribuyen al envejecimiento y a muchas enfermedades crónicas. La comprensión de este proceso podría abrir nuevas vías para tratar con inmunoterapia las enfermedades crónicas relacionadas con la edad, según publican en la revista ‘Med’.
En un estado saludable, estas células inmunitarias -conocidas como células T asesinas naturales invariantes (iNKT)- funcionan como un sistema de vigilancia, eliminando las células que el cuerpo percibe como extrañas, incluidas las células senescentes, que tienen daños irreparables en el ADN. Pero las células iNKT se vuelven menos activas con la edad y otros factores como la obesidad que contribuyen a las enfermedades crónicas.
Encontrar formas de estimular este sistema natural de vigilancia ofrece una alternativa a las terapias senolíticas, que hasta ahora han sido el principal método para eliminar las células senescentes. Podría suponer un gran avance para un campo que ha luchado con la forma de administrar sistémicamente estos senolíticos sin efectos secundarios graves.
Las células iNKT tienen dos atributos que las convierten en una diana farmacológica especialmente atractiva. En primer lugar, todas tienen el mismo receptor, que no aparece en ninguna otra célula del cuerpo, por lo que pueden ser cebadas sin activar también otros tipos de células inmunitarias. En segundo lugar, operan dentro de un bucle natural de retroalimentación negativa que las devuelve a un estado latente después de un período de actividad.
«El uso de la terapia dirigida a las iNKT puede aprovechar su exquisita especificidad incorporada», afirma el doctor Anil Bhushan, profesor de medicina del Centro de Diabetes de la UCSF y autor principal del estudio.
El equipo científico descubrió que podía eliminar las células senescentes utilizando antígenos lipídicos para activar las células iNKT. Cuando trataron a ratones con obesidad inducida por la dieta, sus niveles de glucosa en sangre mejoraron, mientras que los ratones con fibrosis pulmonar tenían menos células dañadas, y además vivían más tiempo.
El doctor Mallar Bhattacharya, profesor asociado de medicina en la UCSF que trata a pacientes con enfermedades pulmonares y es autor del artículo, señala que los resultados presentados para las células iNKT en un modelo de ratón de fibrosis pulmonar ofrecen esperanza para una enfermedad potencialmente mortal que a menudo conduce a trasplantes de pulmón.
«Creo que se trata de una potencial terapia inmunológica para la senescencia y la fibrosis –señala Bhattacharya–. Es una terapia bastante bien tolerada, y sólo tenemos que dar con la dosis y los ensayos».
Investigador de la diabetes, Bhushan empezó a prestar atención a las células iNKT cuando un estudio anterior identificó una relación entre las células iNKT y las células beta pancreáticas senescentes. Como las células senescentes tienden a acumularse en muchos tejidos y se correlacionan con la enfermedad, conjeturó que la activación de las células iNKT podría utilizarse para tratar una amplia variedad de enfermedades.
Fuente: infosalus.com