Un equipo internacional de científicos del Dog Aging Project identificó seis hábitos clave que pueden prolongar la vida de los perros y mejorar su salud a cualquier edad. Desde el ejercicio y la socialización hasta la alimentación basada en evidencia y el cuidado dental, las recomendaciones prometen aumentar la longevidad canina con cambios simples y efectivos
Durante años se creyó que la esperanza de vida de un perro dependía sobre todo de la genética. Pero la investigación reciente demuestra otra cosa: los hábitos diarios y el entorno tienen un impacto enorme en la salud a largo plazo. El Dog Aging Project, junto a expertos de universidades como Virginia Tech, UC Davis y Texas A&M, analizó miles de casos para identificar qué prácticas realmente ayudan a los perros a vivir más y mejor. Estas son las seis que cuentan con mayor respaldo científico.
- Ejercicio regular: la base de la salud canina
El ejercicio constante —no intermitente— es el hábito más asociado a una mayor esperanza de vida. La actividad física habitual reduce diagnósticos de enfermedades crónicas y protege la salud cognitiva. Además, previene la obesidad, uno de los principales factores de riesgo. La recomendación general es dedicar al menos 30 minutos diarios de actividad aeróbica, adaptada a la edad y la raza.
- Socialización y estímulos: un cerebro joven durante más tiempo
Los perros que interactúan de forma frecuente con humanos y otros animales presentan menos problemas de salud y un deterioro cognitivo más lento. El enriquecimiento ambiental —juegos, retos, exploración— promueve nuevas conexiones neuronales y mejora su bienestar emocional. Según los investigadores, socializar a lo largo de toda la vida puede retrasar trastornos asociados a la edad.
- Esterilización: una decisión que aumenta la longevidad
Los estudios muestran que los perros esterilizados suelen vivir más. Las hembras reducen drásticamente el riesgo de tumores mamarios y eliminan los cánceres de útero y ovario; los machos previenen problemas de próstata y cáncer testicular. Además, disminuye la agresividad y la tendencia a escapar, dos comportamientos asociados a accidentes. El momento ideal depende de la raza y debe decidirse con un veterinario.
- Alimentación basada en evidencia, no en modas
Dietas caseras improvisadas o alimentos crudos pueden provocar deficiencias nutricionales e infecciones. Los expertos recomiendan elegir piensos que cumplan con los estándares de la AAFCO, controlar las porciones y evitar la sobrealimentación. La obesidad puede restar hasta dos años y medio de vida, y mantener una composición corporal magra es uno de los mayores factores protectores.
- Revisiones veterinarias periódicas: detectar antes para vivir más
Las visitas regulares reducen un 30% el riesgo de enfermedades crónicas. Los perros vacunados y con antiparasitarios al día presentan menos infecciones y complicaciones. Los especialistas recomiendan al menos una revisión anual en animales adultos, aumentando la frecuencia en edades avanzadas.
- Cuidado dental: más importante de lo que parece
Las enfermedades dentales no solo afectan la boca, sino que pueden agravar problemas cardíacos y causar infecciones graves. El cepillado diario es ideal, aunque hacerlo varias veces por semana ya marca una diferencia. La higiene bucal adecuada está directamente relacionada con una mayor longevidad y un envejecimiento más saludable.
Fuente: es.gizmodo.com
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