Logran transferir corriente eléctrica generada por bacterias
Científicos han logrado una transferencia de corriente eléctrica generada por las bacterias a través de su metabolismo ligeramente más eficiente que los intentos precedentes.
“Recogemos electrones de la bacteria y los transferimos a un electrodo. Esto nos permite obtener una corriente eléctrica de la bacteria en tiempo real, mientras comen, por así decirlo”, explica Lo Gorton, profesor de química en la Universidad de Lund, en Suecia, miembro del equipo investigador. “Este estudio es un gran avance en nuestra comprensión de la transferencia de electrones extracelular en las bacterias”, dice.
La transferencia de electrones extracelular se refiere a la corriente que las bacterias generan fuera de su propia célula. La dificultad de extraer la energía radica en la producción de una molécula que puede atravesar la gruesa pared celular de la bacteria para recuperar los electrones de manera más eficiente. En el estudio actual, los investigadores crearon una molécula artificial conocida como polímero redox para este propósito. El estudio incluyó Enterococcus faecalis, una bacteria intestinal común presente tanto en animales como en humanos.
Los resultados del estudio, publicados en Advanced Energy Materials, son valiosos no solo por su potencial con respecto a la energía eléctrica bacteriana futura; también aumentan la comprensión de cómo las bacterias se comunican con su entorno. Las propias bacterias probablemente utilizan la transferencia de electrones extracelular para comunicarse, tanto con otras bacterias como con moléculas.
“La transferencia de electrones podría ser de gran importancia para la forma en que las bacterias se comunican con varias moléculas y entre sí en nuestro sistema digestivo, pero también para la forma en que la naturaleza funciona desde una perspectiva más amplia. Hoy se piensa que muchos procesos geológicos son impulsados por bacterias”. dice Lo Gorton.
Comprender cómo funcionan y se comunican las bacterias es valioso en muchos contextos. Por ejemplo, las bacterias y otros microorganismos pueden usarse para producir biocombustibles, en lo que se conoce como baterías de biocombustibles microbianos. De particular interés en un contexto energético son las bacterias fotosintéticas. Si están conectadas a un electrodo, pueden generar energía eléctrica cuando se exponen a la luz. Esto ha sido demostrado por Lo Gorton y sus colegas en estudios anteriores.
Un conocimiento más profundo sobre las bacterias también es significativo en términos de su uso potencial para purificar las aguas residuales, para producir moléculas que son difíciles de sintetizar, o para reducir el dióxido de carbono a una forma más utilizable, por ejemplo.
Fuente: EP