Las bacterias, capaces de degradar el 99% de los hidrocarburos del mar
Esta es una de las principales conclusiones de un estudio realizado en el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudio del Agua (IDAEA-CSIC), de Barcelona, que se publica en la revista Nature Geoscience.
Los hidrocarburos policíclicos aromáticos (denominados PAH, de sus siglas en inglés) son un grupo de sustancias químicas que provienen del uso de petróleo y combustibles fósiles, además de incendios forestales, y tienen un efecto negativo tanto en el planeta como en la salud humana.
Los PAH, además de a través de vertidos accidentales, llegan a los océanos por vía atmosférica de manera continua, desde el tubo de escape de los coches y depositándose por distintos medios, como la precipitación y difusión.
Cada mes entran en los océanos Atlántico, Pacífico e Índico unas 90.000 toneladas de PAH, apunta la investigadora Belén González-Gaya, actualmente en la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y anteriormente en el IDAEA.
“Para hacerse una idea de su magnitud, esta entrada mensual de PAH por vía atmosférica es cuatro veces mayor que la introducción de PAH que se dio durante el hundimiento de la plataforma petrolífera ‘Deepwater Horizon’ en 2010 en el golfo de México, el mayor vertido de petróleo de la historia”, añade esta científica en una nota del CSIC.
Hasta ahora, se conocía que los PAH desaparecían de la superficie del mar, pero se desconocía por qué medio.
Los investigadores de este estudio han descrito que el 99% de los hidrocarburos que llegan a los océanos se quedan en la superficie y son degradados por la acción de bacterias.
Además, han constatado que las enzimas implicadas en esta degradación están presentes en todos los océanos.
PAH despositados por vía atmosférica
La capacidad de los microorganismos de consumir contaminantes orgánicos como los PAH se conoce desde hace décadas, detalla por su parte María Vila-Costa, también investigadora del IDAEA, quien añade que “en casos de accidentes petrolíferos, son las bacterias las que acaban consumiendo la mayor parte de los hidrocarburos liberados”.
“Sin embargo, desconocíamos si los PAH depositados por vía atmosférica -un proceso geográficamente mucho más amplio y de mayor relevancia a escala global- también eran consumidos, y en caso que se diese, bajo qué condiciones y con qué magnitud”.
Los análisis se realizaron a partir de muestras recogidas durante la campaña oceanográfica Malaspina en 2010 y campañas polares, en las que se recorrieron todos los océanos del mundo para generar un inventario del impacto del cambio global en el ecosistema del océano.
Vila-Costa, en declaraciones a Efe, ha resumido que a partir de estos resultados se pretende ampliar los conocimientos sobre las condiciones en las que se produce la degradación y el impacto que tienen estos contaminantes en el ecosistema marino.
Fuente: EFE